El perfume - Relatos Eróticos

El perfume

Como ya sabrán soy closetera y nunca había salido vestida a la calle, así que pensé que el fin de semana que no estuvieran mis padres en casa podría aprovechar, después de las experiencias que ya había tenido anteriormente me sentía lista. Me depilé, me maquillé, me puse un vestido rosa de una sola pieza ajustado, acompañado de una tanguita de encaje, unas medias negras, una peluca castaña larga, tacones rosas altos y un abrigo. Salí a las 9 de la noche a caminar por el centro, muy nerviosa. Me sentía nerviosa pero trataba de caminar con seguridad. Algunos carros que pasaban se detenían a observarme y a gritarme algún piropo. Yo los ignoraba aunque por dentro ya me estaba sintiendo muy caliente. En realidad solo salía a dar un paseo, no tenía nada planeado. Iba pasando por una perfumería cuando me di cuenta que no tenía ninguna fragancia de mujer en casa, así que podría comprar alguna que me hiciera oler como una mujercita con clase. Cuando pasé al local el dueño desde la bodega me dijo que ya iba a cerrar. Okey, le dije y me preparaba para salir, cuando se asomó y me vio alcanzó a decirme -Espera, buscabas algo en especial? Yo algo nerviosa respondí sin voltear -No, nada en especial, solo venía a ver si me gustaba alguno -Ven, puedo mostrarte algunos todavía, sólo dejame cerrar de una vez para que no vengan más clientes Pasó a un lado mío por un lado del mostrador, era un tipo de unos 40 años, bien conservado, alto, de cabello largo agarrado con una cola, usaba botas, jeans ...

... ajustados, y la camisa abierta que dejaba ver algo de bello. Se notaba que antes hacía mucho gimnasio. Se veía muy grande y fuerte aunque ya con panza. Al pasar a mi lado pude notar que olía mucho a alcohol. Primero pensé que era por el perfume, pero me di cuenta que en la bodega tenía una botella avierta de vodka. Cerró todo por dentro y le puso llave. Yo en ese momento comencé a ponerme nerviosa ya que me asustaba aquel hombre. A esas alturas no sabía si ya se había dado cuenta el que era una travesti indefensa y caliente. - Y bien, dime, como qué te gusta, los olores dulces o fuertes - Pues no sé, es la primera vez que me compro algo así -Mira, prueba este Me dio una loción y me la puso en la muñeca sobándome con sus dos enormes dedos. Yo ya estaba comenzando a sentir calor. No me gustó mucho, y siguió mostrandome varios hasta que ya algo animado y entre risas me dice -Mira, te voy a mostrar uno que hace que me vuelva loco, me encanta cuando una mujer usa uno de estos Entonces sacó una botella de la bodega y en la otra mano la botella de vodka a la mitad. -Gustas un poco? -Ammm, no gracias,ya me tengo que ir -PEro espera, no te puedess ir aún, tienes que oler este Entonces tomó la botella con la loción y con sus dedos me puso en ambos lados de mi cuello. -Y bien, qué te parece? Sinceramente olía muy rico, me sentía muy femenina y cachonda, pero ya muy asustada por aquel hombre y más aún después de su siguiente frase: -Me dejas olerte? Sin que yo respondiera le dio un trago ...