Mi tio Beto 1 parte - Relatos Eróticos

Mi tio Beto 1 parte

Este relato tiene origen en los inicios de los 90s, yo con 8 años y mi tio con 38 años, lo que empezo como una curiosidad me sumergio en el mas delicioso sexo incestuoso consentido. Contaba con solo 8 años y siempre andaba jugando de casa en casa y por lo mismo fui a casa de mi tia a tomar agua para seguir jugando, todas las casas eran contiguas solo las dividia una cerca la cual no era impedimento para saltarla y andar por todos lados. La casa de mi tia estaba separada la cocina de la casa principal, por lo cual la cocina se ubicaba hasta el fondo del terreno de la casa, entre y busque a mi tia sin obtener exito, camine hacia la cocina buscando un vaso con agua para tomarla y seguir jugando con mis amigos de la colonia, pero cual fue mi sorpresa que al entrar a la cocina se encontraba mi tio Beto sentado en una silla leyendo el periodico, el un señor ya padre de familia con hijos grandes de complexion robusta pansa por tomar cerveza, velludo de brazos, pecho y panza, yo me pare en el marco de la puerta y solo bajo un poco el periodico y me pregunto. ¿que andas haciendo en pleno sol hijo? a lo que yo conteste, es que ando jugando tio pero me dio sed y vine a tomar agua, me acerque a la mesa donde siempre esta una jarra con agua y me servi en un vaso, comence a tomarla y mi tio comenzo a platicar conmigo sobre con quienes andaba jugando y cosas asi. En ese ...

... momento ya el me miraba de una forma mas extraña como que anticipando lo que iba a suceder, me llamo hacia donde el estaba sentado y me abrazo pero no fue un abrazo cualquiera, el fue bajando sus manos hacia mis nalguitas, yo un poco desconcertado no puse objecion al fin y al cabo era mi tio, me giroy me atrajo ya de espaldas hacia el y me sento en su regazo, en ese momento senti como algo duro entre mis nalguitas y el me movia adelante y atras. Asi estuvo un rato y despues lo que siguio yo a esa edad no lo entendia, se paro de la silla y me subio en ella, me bajo mi shortsito y me empezo a urgar mis nalgas y en medio de ellas, yo aun de espaldas a el comenze a sentir algo que me rozaba mis nalguitas por detras, algo que sentia como me daba empujones, algo que despues vi entrar entre mis dos piernitas un intruso gordo y grueso con cabeza rosa y tronco venudo, asi estuvo metiendo y sacando ese descomunal pene de entre mis piernitas hasta que senti como me deposito un liquido blanco que escurrian a lo largo de mis piernas aroojando gemidos y respiros fuertes y profundos, yo confundido aun el solo procedio a limpiarme y decirme que no dijera nada a nadie que era nuestro secreto. Esa vez fue la primera de muchas experiencias que tuve con hombres mucho mas mayores que yo, como si supieran lo que habia pasado ese dia con mi tio me introdujeron al mundo del placer.