1. El sofá


    Fecha: 03/03/2019, Categorías: Incesto Autor: xavimysk, Fuente: CuentoRelatos

    Por fin… la mesa recogida, la cocina arreglada… todo está perfecto y nadie dirá que hay que hacer esto o aquello. Ya era hora de tener mi rato de relax, como de costumbre os vais a vuestra habitación a echar la siesta. Soy el rey del salón, el sofá para mí solo, mi aire acondicionado, mi televisión y mi mando a distancia. Esto si es gloria pienso.
    
    Demasiado pronto he cantado victoria, no han pasado ni cinco minutos hasta que se ha abierto la puerta de tu cuarto y veo con el rabillo del ojo como te acercas al sofá.
    
    -Buff en mi cuarto hace mucho calor, me salgo aquí contigo que está el aire puesto. Anda, hazme sitio que estas muy cómodo.
    
    -Joder Lola, ni cinco minutos me dejáis tranquilo. Digo esto mientras resoplando me aparto hacia el extremo del sofá, y tú te tiras en el haciéndote dueña de la mayor parte de el a pesar de tu menudo cuerpo. – Ponte cómoda si te parece.
    
    -Anda no te quejes, si te gusta que te haga compañía. Vaya rollo estás viendo, andaaa déjame cambiarlo.
    
    -Esto ya es el colmo, no, lo estoy viendo.
    
    -Joder... si seguro que te quedas sopa viéndolo, vaaaa déjame que lo cambie. Dices esto mientras te apoderas del mando a distancia.
    
    -Si claro Dolores, y si te parece bien también le hago un masaje a la señora.
    
    -Pues no, pero mira ya que lo dices hazme cosquillas en las piernas. Y dices esto mientras te tumbas en el sofá recostando tu cabeza en el otro extremo y pones tus pequeños pies sobre mis piernas. Te encanta que te haga cosquillas. Yo me ...
    ... hago de rogar siempre, aunque me gusta mucho hacértelas y tú lo sabes sin duda.
    
    -Ya está bien el abuso Dolores- sé que te fastidia que te llame así.
    
    -Que no me llames así -levantando un pie y fingiendo golpear mi entrepierna… me encojo instintivamente.
    
    Desisto de mis protestas y finjo prestar atención al programa tonto que has puesto en la tele mientras comienzo a hacerte tus cosquillas sin mostrar demasiado interés.
    
    -Así no tonto, hazlo bien, ya sabes como -tu pie izquierdo reposa directamente sobre mi entrepierna y yo comienzo a hacerte cosquillas, esta vez sí como a ti te gusta, rozando apenas tu piel con las yemas de mis dedos y con movimientos muy lentos.
    
    Comienzo a deslizar mis dedos por el empeine de tu pie y subo muy muy suave y despacio por tu tobillo y pierna hasta llegar a tu rodilla para luego volver a bajar hasta tu pie, mi mano describe el mismo camino una y otra vez… Joder ese pantaloncito que llevas puesto es tan corto y tan suelto que prácticamente no tapa nada en esta posición y puedo ver gran parte de tus braguitas.
    
    Estas preciosa, eres preciosa… esta vez las yemas de mis dedos suben más allá de tus rodillas llegando hasta medio muslo para volver a bajar como si lo hiciese distraídamente. No puedo dejar de sentir cierta excitación… Mierda, mi polla comienza a despertar bajo el peso de tu pie. Miro tu cara de reojo, tienes los ojos cerrados. ¿Te has dormido o simplemente los tienes cerrados? Apuesto por lo segundo.
    
    Mi mano derecha sigue ...
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