1. Con una sombrilla en el ano


    Fecha: 08/03/2019, Categorías: Masturbación Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... del cuarto piso pues la tengo húmeda y no sé si me puedas ayudar….
    
    No tardó ni un minuto en salir y yo sólo esperé un par de minutos para que no se viera tan obvia nuestra salida, cuando llegué al otro salón, mi amigo ya tenía su verga de fuera, así que yo me quité los jeans me bajé la tanga me hinqué delante de él y comencé a chupársela al mismo tiempo que me metía por la vagina un lápiz y él me metía 2 de sus dedos por el ano, eso me excitó mucho: Sigue así!!!!, ahhhhh!!!!! ahhhh!!!! qué rico!!!!! qué vergota!!!!!, le decía mientras él me apretaba las tetas y me pellizcaba los pezones.
    
    Se corrió sobre mi boca que dejé abierta para que escurriera su semen por mi cara, me limpié, me medio acomodé la ropa y regresamos al salón para seguir tomando apuntes.
    
    Después de clases regresé a mi casa y seguía muy excitada pensando en lo maravilloso que es el sexo, de ser por mí me la pasaría cogiendo todo el rato, así que me senté a comer y de postre tomé un mango y me dirigí hacia mi habitación que seguía con la ventana abierta, pero a diferencia de la mañana mi vecino ya había llegado, así que vi cómo me observaba por la ventana mientras me quitaba la ropa y comía mi postre dejando que se escurriera el jugo por mis senos.
    
    Muy quitada de la pena me acerqué a la ventana y le grité a mi vecino: ¿No quieres mango? Mientras embarraba la fruta por mi piel especialmente en las nalgas, las tetas y la entrepierna, él me dijo: ¿te limpio? mientras bajaba sus pantalones y dejaba ver ...
    ... su pene.
    
    A una distancia corta pero de ventana a ventana, le dí la espalda a mi vecino, me agaché para que se abrieran mis nalgas y dejaralo ver lo jugosa de mi vagina y la dilatación de mi ano, cuando me sentí más caliente, me comenzó a decir: ¡Te quiero para mi puta perra!, así que no aguanté más y me introduje el hueso del mango por la vagina, al terminar de masturbarme no hizo otra cosa más que salir de su casa para pedirme el mango y lamerlo enfrente de mí mientras yo le hacía un oral para probar esta vez un semen mucho más espeso que el de la mañana.
    
    Mi vecino se fue antes de que llegara mi tío de trabajar. En la tarde yo salí al cine con un amigo que no dejó de meterme mano durante toda la película, en la sala, nos sentamos en la orilla y hasta atrás, lo típico en cualquier pareja caliente que quiere fajarse, así que por dos horas no dejó de besarme, introducir su lengua hasta mi garganta, agarrarme los senos y meter su dedo en mi concha que otra vez ya estaba húmeda, hueles a mango, me dijo, y yo le respondí, imagínate qué hice hace rato….
    
    Terminó la película y antes de llegar a mi casa detuvo su carro frente a un parque, ya estaba oscuro pues pasaba de las 10 de la noche, él metió mano por todos lados: me gustas por caliente, me gustaría que fueras mi novia para coger todo el rato, yo también quiero coger mucho le decía con la voz entrecortada de lo caliente que estaba, no hables más y sigue cogiendo perro, yo quería más pero la hora no me lo permitió y me ...