1. Aventura swinger con mi novia Camila (Parte 2)


    Fecha: 08/03/2019, Categorías: Intercambios Autor: cuentosex, Fuente: SexoSinTabues

    ... cuerpo a Camila. Cuando al mirar para arriba veo que se están comiendo la boca. Los tres fuimos a los sillones de nuevo, Joaquín se sentó primero y le hizo señas a mi novia para que se le sentara arriba. Le di un beso profundo y me quede a un costado, sosteniéndole una mano. Empezó a metérsela lentamente, ella lo estaba disfrutando y miraba al español con esa cara de estar perdidamente caliente. Sentado en frente de ellos me sentía tranquilo y excitado. Veía esa verga realmente grande haciéndose lugar muy despacio en el interior de Camila, ella movía sus caderas imponiendo el ritmo y lo abrazaba. Le apretaba los hombros con sus dedos dando gemidos suaves. Parecía tan chiquita sentada en las piernas largas del español. “Me la va a romper”, pensé. Ella se dio vuelta, con la cabeza para donde estaba sentado yo y se le volvió a sentar. Joaquín con una mano le apretaba las tetas y con la otra estimulaba su clítoris con movimientos circulares. Todo era muy lento, pero al igual que lo salvaje del club de la noche anterior, en mi ...
    ... novia producía un efecto de excitación extraordinario. Se recostaron y Joaquín empezó a metérsela con más fuerza. Mi novia parecía derretirse cuando le besaba el cuello o le chupeteaba el lóbulo de la oreja. Los movimientos fuertes siguieron de otros lentos, pero más profundos. Camila miraba como le entraba y salía ese pedazo de verga. Y levantando más la cola para facilitar la penetración, Camila le acariciaba los huevos. Hasta que Joaquín empezó a gemir entrecortado con movimientos bruscos dejándosela adentro. Ella pareció prenderse fuego y dio un grito ahogado con un espasmo que recorrió sus piernas. Incluso se le puso la piel de gallina. El español se la dejo adentro unos segundos y la besó. Ahí reaccione que se la había garchado sin condón, cuando el semen corría por sus piernas. Se quedaron abrazados. Yo ya estaba completamente pasado de sueño y de alcohol. Ya el sol pegaba fuerte en la ventana y con una sonrisa me quede dormido en sillón del departamento de un desconocido que se volvió a coger a mi novia delante de mí. 
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