Debido a la situación económica de los dos tuvimos que vivir juntos (episodio 7) - Relatos Eróticos

Debido a la situación económica de los dos tuvimos que vivir juntos (episodio 7)

Y se sentía maravilloso mirar y sentir como subían y bajaban los enormes   glúteos de mi suegra Angelica cada vez que se sentaba sobre mí y metía toda la verga en su apretada vagina y descubría como le gustaba tomar el control de la penetración al tener relaciones sexuales , así que supuse que al ser mucho más joven que su difunto esposo se le hizo normal en hacerlo y como era primera vez que teníamos intimidad, no quise cortar esa costumbre y se sintiera cómoda conmigo y luego de unos minutos le veía la cara qué ponía al sentir como  se ponía cada vez más duro mi pene mi erección era mucho más potente  y notó la diferencia porque ahora yo era mucho más joven.

-! Ahh. ahh ..te  sientoo más macho más poderosoo... ahh..Marcoo ..¡

Y sentía como estaba llegando ya a explotar a la llegada del  orgasmo y le temblaba todo su cuerpo, como si estuviera recibiendo una fuertisima descarga eléctrica, entonces la tenía bien agarrada de su cintura cuando convulsuonaba. Y la mantuve sobre mi unos minutos más, luego la puse como quise metiéndole todo mi falo en ese riquísimo agujero tan mojado y caliente. El tiempo sin sexo se hizo notar empezó nuevamente a mover como una poseída, ahí la puse en el borde de la cama y comencé a darle fuertes embestidas y haciéndo que soltara fuertes gemidos. 

-! Ahhh...mm. ahhh...mm.. ¡

Le abrí sus piernas, se la metí entera y mi suegra puso una cara de placer extremo, comencé a moverme y ella ya jadeaba como nunca me imagine verla a la señora ...

... Angelica y entre su gemidos, me preguntó si a su hija la cogia como lo estaba haciendo con ella ahora. 

-! Ahh.. ahh.. ¿ Marco Antonio, dime así la cogias a mi hija.? 

-!.. Si señora Angelica su hija se comía toda mi verga, mañana tarde y noche.. Y ahora nunca le faltará su buen pedazo de carne a usted.. ¡

-! Ahh.. sii que ricoo.. siento como si me estuvieras partiendo en dos.. ¡

Yo me encontraba muy caliente así que cada embestida que le daba mi verga llegaba hasta lo más profundo de mi suegra y gemia como loca me decía que me detenga, además era algo que no pensaba hacer y como la tenía en cuatro ya recibía buenas estocadas y ver como sus nalgotas saltaban cada vez que chocaba con mi verga me generaba un morbo y una calentura increible y luego de un rato me salí de su concha y puse la cabeza de mi verga en la entrada de su culo ella dio un pequeño salto. 

-! Noo.. por ahí no, nunca le permiti a mi marido que me tocará por ahí. ¡

-! Suegrita..tendré cuidado a su hija le gustaba mucho sentír mi pene en su culito.. déjeme un rato y si no le gusta, prometo sacarselo.. ¡

-! Marco Antonio no me gusta tengo miedo. ¡

-! Angelica si no pruebas como me puedes decir que no te gusta.. ¡

Mientras trataba de convencerla mi dedo le acariciaba alrededor de su agujero anal y logré introducir hasta ese momento el primer falange de mi dedo índice. Y cuando cerró los ojos la señora Angelica aproveche y metí mucho más mi dedo en su culo dándole movimientos circulares.