-
Martín mi compañero de la segundaria
Fecha: 19/03/2019, Categorías: Gays Autor: marcosmit, Fuente: SexoSinTabues
Lo que les voy a contar fue mi primera vez con un hombre. Mi nombre es Marcos, viví hasta los 19 en Tandil, una ciudad en el interior de Buenos Aires en donde hice el secundario en un colegio reconocido que era solo para hombres. Tenía 3 mejores amigos con los que compartíamos todo, nuestro gusto por los hombres, casi todos los sábados por la noche, borracheras, pajas, e incluso nuestro gusto por Martin. Él era la fantasía de cualquier gay, media 1,85, morrudo por ejercicio, jugaba al rugby, pelo oscuro enrulado, ojos verdes claros, piel bien blanca, cara perfecta. lo recuerdo y me vuelvo a enamorar. Más allá de lo físico, Martin era bueno, eso nos atraía más todavía. A menudo recibíamos cargadas, empujones, chistes homofóbicos, etc. Pero Martín no. Él no era así. Se vestía de una forma muy normal, no andaba mostrando su físico como el resto de sus compañeros de equipo. Llegando diciembre del último año de la secundaría estaba feliz de no llevarme ninguna materia y cerrar con diez en matemática. Esta materia era algo que me apasionaba y había elegido un profesorado en esta disciplina para seguir mis estudios. Nos juntamos en el recreo con mis tres amigos y charlábamos de las boludeses habituales hasta que se acerca Martin y pide hablar conmigo a solas. Si bien no teníamos mala onda, jamás habíamos entablado una conversación. Mi corazón se aceleró y tartamudeando acepté hablar con él. Todavía lo recuerdo, jean azul gastado, zapatillas topper comunes, remera celeste gastada ...
... también. Todo le quedaba impecable. Ya en el aula y saliendo de mi enamoramiento lo noté preocupado, hasta con los ojos llorosos. -Mira Marcos, yo sé que no somos amigos, me siento re caradura, pero necesito pedirte un favor. - Me dijo. Sus ojos me miraban fijo, intimidante. Podía notar mucha preocupación en ellos. - Necesito tu ayuda. Sos bueno en Matemática, todo el mundo lo sabe y yo me estoy llevando esta materia a final porque no entiendo una mierda. - Esto me pareció raro, Martín era de esos pibes que no puteaban ni decían malas palabras. - Necesito aprobarla sinó no me van a aceptar en la facultad. Estoy dispuesto a pagar por tu ayuda- Automáticamente le respondí que no había problema. Quedamos en reunirnos en mi casa todos los días a las 4 de la tarde. Llego el primer día y lo esperé como se espera un novio, recién bañado, perfumado, peinado. Él llegó con una remera negra, y un short de futbol blanco. El short le quedaba pintado. Realmente me gustaba mucho, no podía dejar de mirarlo y desearlo. Me mataba la impotencia de verlo tan lindo y saber que nunca lo iba a poder tocar siquiera. Teníamos 2 semanas para que él aprenda lo que se enseña en todo un año. Si bien costaba, era duro en matemática, de a poco iba demostrando progresos. A la cuarta clase antes de irse me da un sobre con $400 pesos. Me dijo que su padre le había dicho que me pagara $100 por cada clase. Le dije que no puedo aceptarlo con un tono enojado. Que lo ayudaba de onda, en agradecimiento por los 5 años ...