Jueguitos de una Esposa Nudista 2 - Relatos Eróticos

Jueguitos de una Esposa Nudista 2

Buenas tardes mi nombre es Wilson y mi esposa Marta, tenemos 56 y 49, como ya sabéis mi esposa y yo tenemos cierto jueguito debido a su fijación por el nudismo que aunque me genera morbo y ella disfruta de su exhibición jamás lo hizo frente a ninguna persona, me menciono un día que quería salir desnuda mientras comíamos al inicio pensaba que era un chiste me dijo que era enserio, cabe recalcar que estaba comiendo desnuda en el comedor de la casa, admito que aunque me gusta la idea me genera cierta incomodidad y por supuesto miedo con algún tema legal como la exposición ilegal de genitales ella me mención que tenía unas ideillas para su guarrada me dijo que sería fuéramos a una zona sin personas cerca y que usará una peluca y maquillaje para no ser reconocida, no sé cómo pero me estaba convenciendo y mi polla dura no ayudaba a pensar claro que al final en la noche buscamos cabañas con vistas en las montañas sin tantos turistas, planeamos el viaje para 2 semanas después para que fuéramos en julio fue medio día para llegar a la cabaña de noche y hacía frío por lo que lo dejamos para el día siguiente, a la mañana siguiente desayunamos y nos preparamos para dar el paseíllo aunque un joven que era el que alquilaba las cabañas nos dijo que nos puede acompañar para recorrer los senderos nos negamos y acambio le preguntamos un camino tranquilo sin mucha gente ...

... para poder hablar tranquilo, el chico nos dijo del camino y nos fuimos a media hora caminando mataban las rodillas y Marta estaba callada hasta pensé que se le había olvidó su exhibicionismo hasta que la volteo a ver y se estaba desnudando la muy guarra la veo quitarse su ropa en medio de la nada y ponerse su peluca como si no pasara nada, la veo guardar su ropa en su mochila y caminar con naturalidad, sentía esa sensación de acompañarla pero el miedo de ser descubiertos aún corría en mi cabeza ella iba adelante y yo atrás le tomaba fotos a mi esposa como embobado por su cuerpo y naturalidad hasta que le pregunté porque lo haces amor? Ella me miró y me dijo "disfruto de mi cuerpo y que más da deberías hacer lo mismo amor" esa palabras fueron suficientes para sacar mi polla y ella solo sonrió para agarrarla y caminar, ella no masturbo solo la tomo como si fuera mi mano pero era mi polla, al final nos escondimos en unas rocas para comerle su coño el cual estaba mojada y poder penetrar a mi esposa la muy guarra tuve que taparle la boca porque no paraba de gemir hasta que tuve un orgasmo y al rato ella el suyo nos limpiamos un poco con paños que traía en su maleta y dejar que se vista, volvimos a la cabaña casi en la noche, esa noche nos bañamos, comimos y cogimos, y mientras estábamos en la cama abrazadose dijo que quería que la siguiente aventura la acompañe.