Una de vikingos
Fecha: 24/03/2019,
Categorías:
Intercambios
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... dolor.
Laura se escapó de entre las piernas de Erika, quien ensartada como estaba en mi falo, no le dedicaba el más mínimo cariño. Se tiró encima de Lars quien sujetándola por los muslos la alzó hasta su boca, que empezó a comerse a Laura . Entonces ella le pidió que la sodomizara. Lars no entendía, y ella le grito entonces: "quiero que me la metas por el culo, cabrón, que me lo revientes con tu enorme polla".
El rubio había captado la idea y tirándola sobre al cama, al lado de donde yo estaba culeando a Erika. la puso a cuatro patas y comenzó el mismo ritual que con su chica, aunque esta vez dejó que fuera yo el primero en introducir los dedos en el estrechito culito de Laura, que dicho sea de paso, a mí me encanta follar. Cuando tenía metidos tres dedos, Lars acercó su enorme picha al ojete de la nena y de una fuerte embestida se la metió toda entera. Tuve que sacar los dedos, porque Lars estaba como poseído y le metía unos meneos al culo de Laura que como el mismo le decía, "te lo voy a destrozar, buenorra".
La imagen era idílica, Mi polla estaba a reventar entrando y saliendo en el culazo de aquel pedazo de rubia, que ya llevaba, por lo menos, un par de corridas desde que estaba enculada, y la visión de cómo se dejaba trajinar el culito mi chica, hizo que no me contuviera más y soltara en el ano de la vikinga unos buenos chorros de leche caliente, a lo que Erika respondió con una buena corrida que dejó mi mano, que le estaba sobando el coño, empapada. Si ...
... gritamos, no lo oímos, porque entonces, Lars en dos o tres culeadas más, fue el que se derramó de forma abundantemente en el culo de Laura, que no paraba de correrse con la ayuda de la mano que frotaba su sexo.
Después de este orgasmo final, ellos comenzaron a recoger sus ropas y Lars se acercó a Laura, le dijo algo al oído y después de darle un buen morreo y despedirse de mí, salió del cuarto y ella detrás. Entró Erika en la habitación y también me morreo. Me dijo que se lo había pasado en grande. y que éramos una pareja supercachonda. Me comentó también que seguro que Lars había disfrutado de lo lindo, pues se moría de ganas de tirarse a Laura y además, le había pedido a mi mujer que le diera sus braguitas mojadas, algo que sólo hacía excepcionalmente, con la intención de recordar el polvo con Laura, mientras se la follase a ella. Se quitó la tanga, empapada en sus jugos y con restos de mi esperma y me la dio diciéndome que era sólo un intercambio y que la honraría si yo me corría pensando en ella, como Lars pensando en mi chica.. Nos despedimos hasta el día siguiente
Se marcharon, y Laura entró en la habitación con una sonrisa que delataba alguna travesura. Me contó que Lars le pidió sus bragas para follarse a Erika pensando en ella, en su caliente rajita y su estrecho culito que él se había beneficiado a placer, y eso la había puesto cachondísima otra vez y que al salir Erika, la había pillado haciendole una nueva mamada a Lars, que el rubio premió con una buena regada de ...