La perra de mi hermano - Relatos Eróticos

La perra de mi hermano

Hace mucho tiempo, mi hermano habia comprado un husky, era una hembra y tenia solo semanas de nacido cuando habia llegado a casa, pasaron 2 meses y me habia cambiado de casa, pues mi madre se habia casado de nuevo, lamentablememte mi hermano, por razones de sus estudios, se quedo junto con su perrita, paso un año y visite a mi hermano, cuando llegue el no estaba, escuche a Bella ladrar, (asi es como habia nombrado a la perra) y no paraba, hasta que me di cuenta de la llave de repuesto tirada detras de una maceta La recogi y entre a la casa, Bella me reconocio y movia su cola rapidamente, ella despues hizo algo que no me esperaba, olfateaba mi entrepierna, tanto que se volteaba y alzaba su colita, yo no entendi que me queria decir, me sente en el sofa y ella no paraba de olfatearme la entrepierna, no se si pensaba que tenia comida o algo por el estilo, ella golpeteaba su nariz con mi pantalon, estaba luego lamiendo y yo espantado le dije que se fuera, ella no hacia mas que mover su cola y moverse en circulos, alzaba su rabo como lo hacian… oh por Dios, me dije, no pensara que yo la? Me quede pensando, vi la hora, faltaban 5 horas para que viniera mi hermano, ...

... pero que estoy diciendo? Me dije, ella es una perra no puedo hacer eso, luego ella me miraba fijamente con sus ojos azules, como rogandome, ella alzaba su cola, asi que tuve una idea, me baje los pantalones, y deje que ella me lamiera mi miembro, que rico se sentia, a veces sentia sus colmillos rasgando mi pene, ella ya no aguantaba, lo queria dentro de ella Yo preocupado por lo que pudiera pasar, me arrodille la agarre de las cintura, y fui rozando mi verga en la estrecha panochita de Bella, ella movia su colita de felicidad, yo en cambio sentia algo que me empujo hacia adentro de ella, no gemia si no que lo disfrutaba silenciosamente, sentia una sensacion extraña, nada que ver con la concha de una mujer, luego la acoste sobre el sofa y abri sus patas traseras, lubrique my pene con saliva y poco a poco fui insertandolo, ella solo tenia la mirada fija en el sofa, sentia como su panochita escruñia mi miembro, la coji locamente, como si fuera otro perro me le eche encima, la abraze por detras, que rico se sentia caray, despues de esa vez, iba a la casa de mi hermano solo para cojerme a Bella, me gustaba que cuando me corria, ella lamia mi verga hasta dejarla limpia.