Nina Cap. VIII - Relatos Eróticos

Nina Cap. VIII

Bueno, aquí estamos de nuevo y como siempre encantada de contarles mis aventuras, creo que muchos se ponen a pensar si son del todo verdaderas, bueno, la incredulidad de la persona es su falta de inteligencia y de poder absorber la vida tal y como se presenta cotidianamente, pero en verdad que cuando se tiene libertad como yo la tengo somos punto de observación y de crítica por aquellos que quieren ser y no pueden por su incapacidad de fuerza de voluntad propia a gozar el momento, pero yo si lo gozo y me encanta aprovechar el momento y es esto el por qué soy tan caliente y me encanta el sexo.Estamos de vacaciones con mis amigas en el liceo y la noticia que voy de viaje a México por mi cumpleaños las tiene un poco m*****as porque casi nunca nos separamos y me comentan que me tienen una sorpresa esta noche, llegamos a la habitación de una de nuestras compañeras que no es de las del grupo pero siempre ha querido serlo y al abrir la puerta están más de una docena de nuestras amigas dentro y dicen "" FELIZ CUMPLEAÑOS” esto era una sorpresa y me alegro muchísimo, bueno empezamos a tomar y compartir historias de cuando perdimos nuestra virginidad y como ocurrió, quien lo hizo, como nos gustó etc. seguimos bebiendo licor y vino hasta el punto de que la fiesta se tornó en un desnudo completo, más de 20 mujeres de 13 a los 17 años desnudas en una habitación y borrachas, calientes por las historias de sexo y con ganas de tener sexo, una de ellas dice, tengo una apuesta para aquellas ...

... que dicen ser liberales y sin miedo, por supuesto que me incluí en esta apuesta, la apuesta requería que aquellas que se habían considerado tenían que correr por el corredor del liceo llegar al sótano en donde se encontraba el conserje, posarle en forma seductiva seguir hacia el estacionamiento, montarse en el auto y salir por la interestatal, dar la vuelta y regresar al campus, y nos dispusimos a hacer eso, salimos y corrimos, éramos cinco mujeres, llegamos a donde el conserje, creo que después de esa demostración de carne de pollito se tuvo que masturbar unas cien veces, llegamos al auto y salimos, para nuestra mala suerte al momento de casi llegar de regreso al liceo nos intercepto una patrulla de la policía casi en el estacionamiento, creo que a todas de los nervios no dio una vergüenza, el oficial se acercó y nos dice que una a una nos pasáramos a la radio patrulla pero no hasta que había interrogado a todas por separado, todas salían del auto con una sonrisa que cuando pregunté solo me decían que esperara mi turno de pasar, cuando pase al auto y me senté en la parte trasera los dos oficiales se entraron conmigo uno a cada lado, me miraron y dijeron que habían hablado con las otras y que solo yo podía sacarlas del apuro que nos encontrábamos en esos momentos, ¿qué es lo que quieren?, bueno me dice uno, que nos mames la pinga y que me dejara que me cogieran los dos dentro de la patrulla, no tengo otra salida y al día siguiente salía mi vuelo, accedí y mame y mame como nunca ...