Veronica
Fecha: 09/04/2019,
Categorías:
Voyerismo
Autor: trikitrake, Fuente: xHamster
... cruzamos palabra, ella sabia que estaba m*****o, así como yo sabia que ella estaba excitada; parecía ser un juego para ella. Al minuto apareció el tipo y me dijo que mi tarjeta estaba bloqueada, que no aprobaba el monto.―Eso no es posible, trata de nuevo; pero esta vez concéntrate ¿ok?―dije en forma despectiva.―Ya trate varias veces y el aparato no responde―respondió el idiota ese, con un tono para nada servicial como le correspondería a cualquier mesero; sino que con un tono de cobrador, de alguien que exige lo que es suyo. Me m*****o, claro que le iba a dar lo que era suyo, no tenia que tratarme como a un sinvergüenza que pretendía irse sin pagar. En esto pensaba cuando recordé que no traía la chequera, es mas, nunca ando con la chequera; siempre me manejo con la tarjeta de crédito y la tarjeta del banco con la que puedo girar dinero a cualquier hora y en cualquier cajero automático; pero la maldita suerte de ese día, o el maldito destino, que se yo; había querido que ni siquiera anduviera con efectivo en los bolsillos. Divagué por unos segundos, me puse nervioso. Supongo que a todos nos ha pasado alguna vez, nos ahogamos en un vaso de agua, y solo son los nervios; te descoloca que las cosas no salgan como las has planeado y te encasillas sin que brote la solución, por muy obvia que sea esta. Pues me encasille por un momento hasta que broto, y si, la solución era bastante obvia.―Entonces voy a un cajero, y te traigo tu dinero en efectivo―dije levantándome―Vamos ...
... Verónica―extendí la mano hacia mi mujer, solo quería salir de ay.―Perdón, pero nadie me garantiza que vuelva a pagarme―el tipo se interpuso en mi camino.Le ofrecí dejar mis documentos en garantía, pero el muy hijo de puta se negó. Discutimos un rato; para pagarle tenia que salir a buscar un cajero y el muy idiota no me dejaba ir, ya estaba amenazándome con llamar a la policía "te voy a meter preso"decía el muy desgraciado. Estábamos a punto de trenzarnos a golpes cuando Verónica se interpuso.―Ve por el dinero amor, yo me quedare para que este caballero confié en que regreses con el dinero―dijo volviéndose a sentar coquetamente―no pensara que mi marido me abandonara por una pequeña cuenta, ¿o si?―le dijo al baboso mientras cruzaba sus piernas. Dios, de nuevo la impresión de que ella jugaba con el gordito ese. Claro, el tipo quedo mudo. Lo pensé rápidamente y a mi pesar me di cuenta de que era la solución mas rápida para salir de aquel estúpido enrollo en el que me había metido.―¿Estás segura?―pregunté.―Pues claro, ve y date prisa que debemos ir por Tomas.Mire al mesero, ya se había apoyado en la barra nuevamente a mirar a mi mujer. De inmediato supe que no pondría inconveniente, le dije a Verónica que regresaría de inmediato y salí del local. No quise voltear a verlos desde afuera, sabia que ese chaparro regocijaba su vista con mi mujer, y no me sacaba de la cabeza que a ella le gustaba provocar al tipo ese; fuese para calentarme o no. Estaba seguro que de alguna manera le había ...