A los pies de mi amiga. Parte 2
Fecha: 21/08/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: DavidAl, Fuente: CuentoRelatos
Había estado lamiendo el pie derecho de mi amiga María y no sabía por cuánto tiempo, solo quería más. Pero ella apartó el pie y ordenó:
-Besa mi empeine de princesa y agradece.
Tomé su pie casi con devoción y besé el empeine. Ella tenía el pie izquierdo en mi hombro, el derecho en mi boca y sentada en su sofá... Era una Diosa y yo su esclavo.
-Gracias Mi Ama por este premio, honor que me das.
Secó su pie mojado de saliva en mi pelo, ya no había sudor porque estaba en mi boca o mi cara. Me volvió a usar de reposa pies sin decir nada, veía la televisión, usaba su móvil, y sus dos pies descansaban en mi hombro. Todo fue una trampa porque cuando dije «Ama, ¿Voy a adorar el otro pie?» ella mostró una pequeña sonrisa:
-¿Quieres?- Me dijo.
Miré al suelo en silencio pero sentó un golpe suave pero firme en mi cara de su pie.
-Responde esclavo.
Pensé que no podía estar más humillado así que dije:
-Sí, me encantaría Ama.
-Pues suplica- seguía mirando al suelo. Tomé aire.
-Ama, por favor, déjame adorar tu pie, por favor... No pediré más y seguiré siendo tu esclavo dura...
Me cortó que su pie, el izquierdo, pasease por mi cara. Ya no estaba mojado de sudor pero tenía lana de los calcetines y un olor típico de deporte. Lo hacía para distraerme.
-¿Por qué paras?
-perdón. Decía que sería su esclavo durante el tiempo que quieras- Su pie tapaba mi visión, deformaba mi nariz, movía mis labios... Era una gran distracción y no podía parar.- Si me dejas ...
... adorarlo no tendré límites como esclavo.
Apartó su pie de mi cara, lo estiró y dijo:
-Abre la boca.
Obedecí y ella metió los 5 dedos un poco más, hasta el principio de la planta, en mi boca. Imaginad: arrodillado en el suelo, ella con su pie derecho en mi hombro izquierdo, y su pie izquierdo entrando en mi boca. Al principio no me costaba nada pero poco a poco fue entrando más el pie. Disfrutaba el sabor, la situación y el olor. Se ayudó de su otro pie, que lo puso en mi nuca e hizo fuerza en la dirección opuesta. Ya sentía que estaba rojo, me acostaba respirar y mi cara se estaba deformando. Ella no se reía pero en su cara noté que disfrutaba el poder y la situación. Estuvo un rato muy largo para mí y tomó varias fotos y un vídeo. Aguanté como pude y por fin sacó su pie lentamente. Parecía como si saliese un pene de una vagina, estaba mojado, salió lento y poco a poco recuperé las formas. Con el pie salió bastante saliva que lo dejó con una gran cantidad de líquido.
-Quítame la saliva con la boca y vuelve a tragártela.
Empecé a lamer por todos sitios la saliva. Entre los dedos había mucha, con algo de sabor de sudor y suciedad. En el secarlo tardé demasiado, y cuando se aburrió me dijo que traiga un cubo con agua y toalla. Los lavé.
Eran perfectos... Jugué con ellos, disfruté, tocaba sus dedos con sus largas uñas, mojaba el talón, frotaba los pies con mis manos.
-¿Estás disfrutando? Reconoce el honor eh.
-La verdad es que sí Ama.
-Describe el sabor ...