Mi vecina Delia
Fecha: 21/08/2017,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Delia es una señora vecina de casa que entre otras cosas se gana la vida como cobradora de la sociedad de fomento del barrio.- Actualmente tiene 54 años pero todavía conserva todo lo bueno que lucía en su juventud, cuando el apodo de ella era “Puti” como la conocía todo el barrio; hace falta muy poca imaginación para darse cuenta de a que se debía su apodo, pero es cierto, es tal cual vos lo habías pensado.-
En su recorrida haciendo cobranzas venía todos los meses a mi oficina siempre para cobrar alguna cosa; o la cuota del mes o alguna publicidad, pero lo cierto es que todos los meses me hacía una visita; donde aprovechaba y se soltaba diciendo cosas con doble sentido, mientras yo me sonreía y siempre mantenía mi condición de hombre serio.- Pero hace algunos meses me empezó a trabajar mi cabeza y pensé que podría cogerme a Delia, que en realidad está muy buena pese a sus 54 años; tiene unas tetas chicas pero bien firmes; unas buenas piernas y un culo ¡!que culo¡¡ mama mia; es para ponerlo en un marco de un cuadro porque es hermoso; me enamoré de el y me dispuse hacerlo mío, asi que la semana pasada cuando vino nuevamente a cobrarme la mensualidad, al saludarme y desearle felices fiestas, le dije como haciendo tanto tiempo que nos conocíamos me decía solamente felices fiestas a secas y no tenía la amabilidad de darme un beso; ella se sonrió, me dijo que yo tenía razón, y dando una vuelta al escritorio, vino y me dio un lindo beso en la mejilla; yo le respondí al beso y ...
... mientras tanto con mi mano derecha le agarré una teta y se la apreté un poco; ella no dijo nada y también con su mano me hizo una caricia sobre el pantalón donde se encontraba mi pija que en ese momento pegó un salto y se puso dura, notándolo ella y diciéndome que lindo lo que estaba tocando.-
No la dejé ir, seguimos charlando y le dije que me hacía gustado mucho lo que habíamos hecho, pero que me gustaría seguirlo en otro lugar donde estuviéramos solos; ella me dijo que al día siguiente ella tenía toda la tarde libre y si yo quería podíamos ir a un hotel a sacarnos mutuamente las ganas.- Quedamos en eso y al día siguiente, con muchísimo calor, a las 3 de la tarde estábamos entrando a un hotel mas o menos cercano a nuestro domicilio.- En cuanto entramos a la habitación, se empezó a desnudar, me dio unos profundos besos de lengua, me bajó los pantalones y los calzoncillos y su puso mi pija en la boca y me dio una tremenda mamada; yo lo único que podía hacer era tocarle las tetas y la verdad que con eso me estaba entreteniendo de lo mejor; dejó de chupármela, la hice acostar y abrir de piernas y empezamos a hacer un fabuloso 69, que rica concha que tiene Delia; cuando le iba chupando bien la concha, empezó a gemir porque dijo que se acordaba de sus tiempos de puta joven y hacía demasiado tiempo que nadie le chupaba la concha de esa forma; en seguida tuve un orgasmo y pegó un grito anunciándomelo; cuando se repuso de ese orgasmo terminó de desnudarse y me dijo que quería sentir ...