1. La puta


    Fecha: 23/04/2019, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... le meamos en todita su preciosa cara.
    
    Luego volvimos atarla al potro.Esta vez de espaldas y en forma de 1,dejandole el ano a nuestra altura para follarselo.Los tres,mas el perro,la volvimos a violar,esta vez analmente.
    
    Cuando todops nos hubimos deleitado con aquel culito,cogimos unas baras y le dejamos el culo,plantas de los pies y patas ensangrentadas por todos lados.
    
    El castigo estaba siendo muy fuerte,no sabia como lo podia resistir sin perder el conocimiento o simplemete morir.
    
    La inlleccion que Mon le habia puesto en vena funcionaba.Le habia puesto una dosis de droga para hacerla muy resistente al dolor.
    
    Despues de otra buena ducha y otra inyeccion la volvimos atar al potro.Esta vez de rodillas,dejandole la boca a la altura de nuestras pollas.
    
    Le pusimos un habrebocas como el que se husa en las clinicas dentales y nos hizo una esplendida mamada a cada uno.El perro tambien participo.
    
    Luego la atamos a dos ganchos que salian del suelo y a otros dos que salian del techo y le dejamos la espalda muy marcada y sangrante con los latigos.
    
    Despues de una buena ducha.la llebamos a la cama con un habrebocas puesto.Yo me tumbe debajo de ella,que estaba a cuatro patas metiendole mi polla por la cona.Mon se la metio por la boca y Nito por el culo.
    
    Nos follo a los tres en una sola operacion.
    
    Despues la volvimos a crucificar y nos fuimos.Alli quedo el cuerpo solito y colgado de la cruz.
    
    Seguro que se habia vuelto muy sumisa,dejandose hacer lo que los clientes querian al alquilar su cuerpo y dando muchos y buenos placeres.
    
    No creo que quisiera volver a pasar por todo aquello.Mas le valia y si no ya sabia los castigos que le esperaban si no era obediente y no ganaba dinero,mucho dinero,para su AMO.
    
    Ahora,tiempo despues,siempre lñe pregunto a Mon si no hay otro cuerpo para educar.El otro dia me dijo que habia un macho al que teniamos que hacer muy sumiso.
    
    Chao
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