Pirucha y su hijo - Relatos Eróticos

Pirucha y su hijo

... que la vieja lo echo de casa, de dolor gritabas, no de placer, pobre Joaquin se rajo sin acabar. Asi de boluda fue mi primera ensartada, no le pude dar satisfacción al que me la había otorgado a mi. Mucho la tarde tuvimos la revancha y cada tanto viste que nos visita, -si, y siempre coronamos la visita con algún polvito. Luego tuve varios novios y la vieja me hizo colocar un diu, desde ese dia fui mas buscada y tuve muchas buenas oportunidades. El que menos me duro fue un chico muy lindo, con un físico formidable con una pijita diminuta pero agradable, que al introducirla al segundo bombazo me acabo, reacciona y pensaba ahora durara un rato como cualquiera, otros dos bombazos y me moja toda, lo mande al carajo porque me dejo caliente para colmo adentro del auto. Odio a los eyaculadores precoces. Y con papa?, eso fue un noviazgo de meses hasta que nos decidimos tenerte, me saco el diu y en la primera cogida sentí que ya estabas tu dentro mio, sabes las mujeres tenemos un sentido dormido que siempre sabemos cual es el polvo que nos embaraza. Se lo dije y no me creyo. Te gustó mucho, si, seguro y mas sabiendo que esa semilla germinaría, de allí en mas gozamos como locos sin diu ni nada, creo que es sicológico. Y ahora lo tienes puesto, si claro o acaso deseas embarazarme, seria lindo. No jodas hijito soy muy vieja y no deseo que nadie compita con tu cariño, ni siquiera un hijo tuyo. El mocoso me dijo, no me estas corneando ahora, no hijo ahora no, pero ambos lo haremos pronto ...

... no nos faltara oportunidad, no me agrada la idea, seguro, pero debemos respetar nuestro pacto. Cuando me cogio el orto lo dilato según le indique y ambos lo gozamos, pero su debilidad es mi concha es que mis juguitos son incomparables. Me pidió le siguiese contando sobre su padre, que deseas saber, dos cosas, una como terminaron y si lo volviste a ver, -si terminamos por tedio, ambos nos cansamos uno del otro, creo que al final del embarazo se busco otra y la continuaba cogiendo, yo me sentía abandonada y mi consuelo al nacer eras tu y tus mamadas con las que regularizaba mis ansias con bellos y suaves orgasmos, -yo los provocaba?, si hijo era tu contribución a mi felicidad. Al año y diez meses, luego de nacer tu, de común acuerdo nos distanciamos, pero de tanto en tanto nos encontramos para saber de nuestras vidas, -se interesa por mi?, claro, no lo dices con conviccion, solo nos vemos para un polvito circunstancial, nada mas. Asi pasamos un tiempo de fidelidad absoluta y volvimos a escalar la montaña ahora sin ninguna dificultad, pero nos detuvimos en un lugar cercano al de la cagada, ya que los senderos van cambiando y nunca pasan por el mismo lugar, nos detuvimos y ambos meamos solo por cabala, reimos juntos y me dice te animas, -a que?, a echarnos un polvo, con este frio tu corcho esta solo para tapar un pequeño frasquito, fanfarron, te la he visto al mear. Siempre lo incitpe, confieso con dolor a que buscase una compañera de vida y se perpetuase a través de uno o varios ...