1. Haciendo el amor con mi hermano


    Fecha: 02/05/2019, Categorías: Incesto Autor: Luzma, Fuente: CuentoRelatos

    ... les dije que soy bajita de estatura, y besándolo por el cuello le dije: "seré tuya, cuando quieras". Y nos separamos! Al siguiente día, hubo una pelea entre mi marido y yo donde Enrique intervino, como mi marido es era el que pagaba la renta, no tuve otra opción que pedirle a Enrique que se marchara a vivir con nuestro tío, y que yo pasaría a verlo de vez en cuando. Pero se enfureció conmigo y dejo de hablarme por tres largos meses, si tres largos meses que tuve sufriendo y pensando porque no me buscaba, tenía que buscar la forma de pedirle perdón, y la única manera fue formando una pelea con mi marido marchándome del hogar con mi hija e hijo, a vivir en una dirección nueva donde nadie supiera. Esos tres meses fueron de furia, infierno, lamento, y atracción hacia mi hermano. Pero no hubo nada que me detuviera estuve varios días pensando cómo le pediría disculpas, así que un martes por la tarde decidí darle una llamada, la cual el recibió con mucha alegría, le dije: "hola papi, tanto tiempo que no te comunicas conmigo", contesto: “es que no quiero saber nada de tu marido, y por eso me he mantenido aislado de ti". Continuamos nuestra conversación la cual termine invitándolo a mi casa para explicarle que ya no vivía con el estúpido de mi marido y me había mudado hacia otro local. Le di la dirección y luego después de colgar rápidamente me di una ducha, refrescándome para nuestro encuentro, me puse los pantaloncitos cortos que tanto le gustaban, los cuales use aquella tarde ...
    ... cuando me metió el dedo mientras afeitaba mis muslos. La blusa esta vez era más revelada y sin brassier, para que viera lo que se iba a comer esa misma noche. No sabía si él tenía el mismo pensamiento que yo, pero tenía que hacer que me perdonara por haberle pedido que se marchara de casa, mientras vivía con mi ex-marido. Estuve segura de que mis pantaloncitos cortos mostraran completamente mi chocha, mientras me miraba al espejo de la puerta notando que si se veía tremendo bollo con una raja que cualquier hombre desearía comerse incluyendo a mí hermano Enrique. Volteé y mis nalgas perfectamente formadas en aquel short me dieron una sensación que no tuve otra manera que sobármelas para calentarme. Mis hijos regresaron de la escuela y les dije que su tío venía a verlos en un par de horas la nena se puso más contenta que el nene, ya que él lo adoraba tanto que estaba un poco enfadado con él por no venir a vernos en tres meses.
    
    Enrique llego a eso de las 6:00 de la tarde pero los chiquillos ya estaban durmiendo, corrí hacia la puerta entre nerviosa y contenta a abrirle, posándome del marco mientras lo miraba a sus ojos, el noto mi cuerpo y mirándome de arriba abajo, mordió sus labios, sus salivas salían por su quijada, y me tire sobre el entregándole un beso en los labios y besándolo por varios minutos sin despegar mis labios de los suyos mientras chupábamos nuestras lenguas. Lo invite a entrar y mientras caminaba frente a el pude percibir que clavaba sus ojos a mis nalgas ...
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