Mi vecino maduro
Fecha: 22/08/2017,
Categorías:
Gays
Autor: chirolas, Fuente: SexoSinTabues
... estás haciendo y acá te espero El vecino ya estaba algo tomado, demasiado para mi gusto, no me gustan los borrachines impertinentes y él es de ese tipo, así que decidí hacerme el desentendido y no volví a salir. Eran algo así como las 10, y volví a salir a recoger unas cosas del patio, en eso el vecino me ve a través de la barda. -Luisiiito!! Te estuve esperando no volviste canijillo --Me ocupe en algunas cosas de la computadora y se me paso el tiempo -Se ocupan las putas mijo, se ha dicho con todo respeto --Jejeje Estaba ya algo tambaleante así que no quería darle tanta cuerda; la reunión ya se había terminado, solo estaba el junto al asador, y con varias cervezas tiradas en el piso, para cortarle la plática le pregunte por su esposa --y la vecina, no la vi en todo el día -se fue a casa de Ruben (su hijo) vuelve mañana, me tocara dormir solo hoy Al decir este se agarra el bulto, debo admitir que el señor siempre me ha parecido interesante, pero nunca pensé algo así, asumí que solo había sido una reacción aislada y no pasaría nada. -- y Beto?? No está?? -No, hoy le toco trabajar, saldrá más tarde --Entonces a ti también te tocara dormir solo, muy mal, muy mal- y se volvió a sobar el paquete Esta ocasión si vi algo más de intenciones en ese movimiento, simplemente lo ignore, sabía que estaba tomado. Voltee a su patio y no lo vi más, así que pensé que se había ido a dormir. Pero no, sorpresa para mí, salió frente a nuestro portón, con un six de cerveza en la mano y en la otra ...
... algo parecido a un plato de comida, como pudo abrió el portón y entro. -Ten mijo, te traje algo para que comas, y unas cervecitas para compartir -- Gracias señor, acabo de cenar, pero se lo guardo a Beto que tanto le gusta la carne asada -No me digas señor mijo, ya sabe q los quiero mucho, como a mis hijos los dos cabrones --Gracias señor, igual nosotros los apreciamos mucho Como pudo, tambaleante que andaba, me abrazo y me dio una palmada en el trasero, perfectamente sintió lo duro de mi trasero, no es por presumir pero es algo prominente, y más porque no traía calzones, así q él pudo sentir q no los estaba usando. Igual lo abrace, pero por un costado, pero él se me replegó y siguió palmeando mi trasero, con delicadeza lo solté y le comente que iría a dejar el plato a la cocina Cuando regrese él ya estaba instalado en nuestra mesa de jardín, ya llevaba dos cervezas (se las tomaba como agua) y arrima una silla junto a la de él -ten mijo, acompáñame con una -- Claro, gracias – estaba algo fresco el clima, pero igual me tome la cerveza para no desairarlo, aunque aquellas nalgadas me habían dado un poco de calor Empezó a platicar de trivialidades, pero entre cada cosa empezó a poner su mano en mi pierna y apretar, y poco a poco su plática fue subiendo de tono y sus agarrones más, debí detenerlo, pero me estaba gustando y creo q a él también, porque su pantalón ya deslumbraba un bulto visible. - y cómo les va en sus cosas, mijo -- que cosas señor - pues ya sabes sus cosas intimas ...