1. EL INCESTO EN MI VIDA (PARTE 1)


    Fecha: 19/05/2019, Categorías: Incesto Autor: juangm78, Fuente: RelatosEróticos

    Como todo el mundo, creo yo, lo primero es descubrir tu sexualidad con las pajas, yo empecé a los 11-12 años a masturbarme, por aquel tiempo eran con esas revistas que podías pillarle a algún amigo o a un primo, aquellas mujeres que nos llamaban la atención, con aquellos pechos y esos coños peludos, hace ya algunos años de esto, hoy en día tengo 36, así que echar cuentas, teniendo 13 años mis padres trabajaban en el campo, por lo cual los sábados y domingos por la mañana, me quedaba en casa de una tía mía, casada con un hermano de mi madre que se iba a trabajar con ellos, por aquel entonces ella rondaría los 40 más o menos, era delgada, morena, pelo corto, no muy alta, con unos pechos normales pero que me llamaban la atención.
    
    Una mañana de sábado, tras dejarme mis padres allí, me encontraba en el salón de su casa, viendo la televisión, mientras mi tía me había puesto el desayuno y ella se había tomado un café, tras desayunar se levanto y me dijo que iba a ducharse, entro en su habitación, ya que al ser un piso pequeño todas las habitaciones daban al salón de estar, al salir para dirigirse al baño salió solo con bragas y sujetador y se dirigió al baño, en aquel momento mi polla se puso dura como una piedra, a esa edad suele estar así todo el día, pero aquello fue como un resorte para que estuviera a punto de reventarme.
    
    Al terminar su ducha volvió a su cuarto envuelta en una toalla, dejándome ver sus piernas, y al llevarla apretada a su pecho, las tetas se le salían por ...
    ... arriba, tal y como entro a su cuarto yo salí corriendo al baño, entre y empecé a meneármela como un mono, pero el ímpetu del momento y que en ese momento toda la sangre de la cabeza se me había bajado a la polla, hizo que se me olvidara echar el pestillo, y por supuesto mi tía me pillo en plena paja.
    
    Seria porque por aquellos años uno era más niño de lo que puede ser hoy uno de 13, pero yo en ese momento me puse a llorar y entre sollozos le suplicaba que no le dijera nada a mis padres que no volvería a hacerlo, para mi sorpresa ella me seco las lagrimas y me dijo que me tranquilizara que no pasaba nada, que sería nuestro secreto, ya más tranquilo y todavía sollozando me subí los pantalones y me dirigí al salón, no cabe decir que en aquel momento más que un pene tenía un cacahuete.
    
    Ya estaba más tranquilo pero todavía con la pillada que acababa de sufrir dando vueltas en mi mente, cuando mi tía llego, esta vez con albornoz, y se sentó a mi lado, me dijo que no tenía que preocuparme que eso era normal, que había pillado también a su hijo en varias ocasiones, mi primo tenía 18 años, que nunca lo había regañado porque todos los hombres lo hacían y las mujeres también, al escuchar aquello mi mente se imagino a mi tía masturbándose y claro está mi polla volvió a reaccionar, ella se dio cuenta y empezó a reírse, me dijo "¿otra vez estas así?", yo me ruborice y baje la cabeza, ella siguió riéndose y me pregunto que había pensado cuando fui al baño a tocarme, le respondí que al ...
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