Pili y Mili - Relatos Eróticos

Pili y Mili

Julián estaba preocupado y no era para menos, últimamente en las noches no podía dormir, pero ese insomnio no era debido a problemas de salud , el asunto era más grave, sus dos hijas gemelas Pili y Mili eran la causa de su desvelo…no le quitaban el sueño por ser problemáticas, ni por sus notas en el colegio ya que eran muy buenas estudiantes, ni por su falta de afecto hacia él, porque lo querían demasiado y ahí empezaba el problema…las pequeñas gemelas habían crecido, ya no eran esas niñas felices que deambulaban por la casa en paños menores sin llamar la atención de nadie… su madre había fallecido en el parto y las dos niñas quedaron en poder de la abuela materna hasta que tuvieron edad de entrar al colegio, Julián colocó a Pili y Mili en un colegio semi internas, estudiaban de lunes a viernes y el fin de semana la pasaban con Julián en su apartamento, cuando eran más pequeñas el fin de semana era esperado con ansiedad por su padre pues podían compartir en familia muchas cosas agradables, comer lo que les gustaba, ir a cine, ver televisión, dormir hasta tarde, andar como quisieran, les fascinaba andar descalzas y con el mínimo de vestuario…Julián les alcahueteaba casi todo y el orden en ese apartamento colapsaba el fin de semana, pero eran muy felices…sin embargo las niñas dejaron de ser niñas y se convirtieron en dos jóvenes muy bonitas, muy inteligentes pero muy curiosas…ellas empezaban a tener muchos interrogantes que desafortunadamente no tenían un interlocutor ...

... apropiado…las compañeras de colegio en lo que menos pensaban era en las asignaturas escolares, preferían los temas sexuales que manejaban con poco conocimiento real y si con mucha imaginación…los lunes cuando regresaban de sus hogares la mayoría de ellas llevaba una historia salpicada de sexo…todas coincidían en haber visto a sus padres teniendo relaciones sexuales, la mayoría se jactaba de conocerle la verga a su padre y la vagina a su madre, otra minoría contaba las aproximaciones sexuales con sus hermanos y primos…pero Pili y Mili no podían contar nada…no tenían madre, carecían de primos y su padre era muy reservado…aburridas con esa falta de tema para los lunes se pusieron de acuerdo para que los próximos fines de semana fueran muy diferentes… quedaban pocas cosas que ellas desde niñas conservaban con evidente entusiasmo, una era jugar con su padre en la cama haciéndose cosquillas, jugando con las almohadas…la otra era disfrutar de las historias que les contaba su padre cuando el sueño las iba venciendo…Julián ayudado con los cuentos de Andersen y de Grimm e intercalados con relatos de la mitología llevaban a las niñas al mágico mundo de las hadas, de los ogros, de los enanos y de las brujas, ellas se acostaban al lado de su padre una a cada lado y se refugiaban en los brazos de Julián para sentir la seguridad y la protección paternal y se quedaban dormidas hasta el otro día… Pero Pili y Mili ya no eran esas chiquillas de antes…sus curvas exuberantes habían aparecido en sus ...