Lolita la pequeña diablilla - Relatos Eróticos

Lolita la pequeña diablilla

... muy pronto frente a sus ojos desorbitados de la emoción tenía la enhiesta verga de don Carlos, empezó a lamerla con gusto, con las ganas de una niña glotona frente a su golosina favorita, sus chupones fueron tornándose violentos y pronto los movimientos de las piernas del abuelo le avisaron a Lolita que estaba próxima una eyaculación, estaba ansiosa de degustar esa lechada, quería comparar esos sabores de un semen de un hombre joven y un adulto mayor, una copiosa lechada de semen la sacó de esa ansiedad, el semen espeso tenía un sabor diferente pero igualmente delicioso… se lo trago íntegro y con cuidado le limpio el glande al abuelo y se retiró de su cuarto… Lolita volvió a repetir esa semana su rutina matinal tratando de acercarse más a los dos abuelos…a doña Mabel la caricia de su cabellera la fue bajando hasta llegar a sus senos…Lolita aparentando una inocencia de las cosas empezó a preguntarle a doña Mabel de su cuerpo, tocando sus senos le pedía explicaciones de su configuración, rozando sus senos preguntaba porqué se paraban, esos roces premeditados empezaron a despertar emociones dormidas, las suaves manos de su nieta hábilmente manejadas la hacían sentir un ardor uterino que ella creía que ya no existía, los dedos de su nieta empezaron a deslizarse a su bajo vientre, mientras Lolita acariciaba las enormes tetas doña Mabel sentía una hoguera en su entrepierna, Lolita se descaró empezó a besar esos senos y su boca se fue bajando hasta llegar al sexo de la abuela, ...

... doña Mabel quería apartar a su nieta pero los deseos le ganaron y dejó llegar esa boca esperada hasta su vagina, Lolita empezó a degustar sus jugos, la abuela se retorcía y apartaba más sus piernas para dejar expedita la entrada a esa gruta…muy pronto doña Mabel sintió un orgasmo pleno de emociones…su vista se nubló y un gemido ahogado salió de su garganta… Con el abuelo la situación fue similar, Lolita se le acomodó al abuelo y empezando con sus tetillas empezó a acariciarlas, luego a jugar con los vellos de su pecho, don Carlos sin querer fue empezando a sentir que su pene se paraba, Lolita empezó a chupar más y más las tetillas mientras sus manos se deslizaban hacia el bajo vientre, al fin encontró esa anhelada y esperada verga, era un cilindro respetable, don Carlos trató de oponerse pero las ganas de sentir una mamada de verga era muy grande , se quedó quieto mientras Lolita se empezó a deleitar con el voluminoso miembro, su boca experta en arrancar caricias insospechadas fue excitando a su abuelo, desesperado con esa felación tomó la cabeza de su nieta para apretarla más y más contra su miembro, sentía como su torrente sanguíneo se subía al máximo y un orgasmo acompañado de una copiosa eyaculación lleno de semen la boca de su nieta…su abuelo aulló del placer y luego se deleito mientras su nieta lamía y relamía su verga hasta que sus últimas gotas de semen fueron succionadas por esa boca ávida. Lolita se sintió al fin en familia, ya no extrañaba las mamadas de verga a su ...