Esposa preñada por un negro
Fecha: 01/08/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Katherine35, Fuente: SexoSinTabues
... dos cafés y azúcar. Para Modou fue lo último de la farsa. Le sacó la bandeja de la sus manitos y le plantó el beso con el que no habría vuelta atrás. Le comió la boca y le metió la lengua sin miramientos. Además, volvió a la carga con el manoseo de las tetitas pequeñas de Janine y por debajo de su pollera. Ella jadeó resignándose, ahora sí, a que no tenía escapatoria y que iba a terminar perforada esa noche. Pero no se imaginaba lo que vendría…. En cinco minutos la desnudó y la recostó en los almohadones del sillón abriéndole las piernitas con sus poderosos antebrazos y tomando con sus manos los bracitos de ella. La tenía inmobilizada y le chupaba la vulva mientras Janina se quejaba y gemía. Le pasaba la lengua por toda la raja y le mojaba todos sus pelos alrededor de su abertura. Modou olfateaba el aire mientras lamía la vagina de mi esposa y se daba cuenta de su estado de celo, indudablemente él recibía el olor de su concha como señal de receptividad y –sin que mi mujer lo vea- se reía y ponía una mueca maliciosa. No la dejó llegar al orgasmo y se sentó a su lado, esperando la reacción de ella. Ella dudó, pero miró la entrepierna de él y comenzó a desabrocharle el pantalón… -"Janine, ahora sabrás qué significa Modou Moussa", dijo el africano, "Quiere decir Semental Implacable". Mi esposa estaba bajando sus slips y vio con asombro lo que Modou portaba entre sus piernas. -"Me dicen así por el tamaño de mis genitales y mi escroto, y por la potencia de mi esperma", dijo calmo ...
... y con su voz gruesa e imperturbable. Estaba aún en reposo, pero su verga era de 10 pulgadas y gruesa como una lata de cerveza. Si su cuerpo era negro carbón, sus genitales eran más negros aún. Janine, muy asustada, la tomo con una de sus manos y notó lo pesado que era ese garrote. Lo pajeó un poco y comenzó a crecer. Lo levantó y vio el resto del espectáculo: Realmente impresionante. Sus testículos descansaban entre sus piernas dentro de su escroto, que colgaba hasta la mitad de sus largos muslos. Cada una de sus bolas era del tamaño de una bola de pool y se veían pesados y vaya a saber con cuánta carga de esperma dentro de ellos. Él se paró junto al sillón y Janine hizo lo mismo. Él le mostró el tamaño de su escroto y hasta dónde colgaban. Fácilmente el saco de su escroto descendía 8 pulgadas. Janine, en silencio, los comparó con mis testículos que apenas superan el tamaño de las aceitunas. Casi sin agacharse levantó la verga y le pasó la lengua por la punta suavemente. Modou gruñó. Ella, con su otra manito, tomó uno de sus testículos y se sorprendió por la alta temperatura que emanaba de ellos, en señal de la aptitud fertilizadora del esperma que contenían. -"Hace dos meses que no estoy con una mujer", le dijo el negro al oído agachándose y acariciándole nuevamente la vagina peluda. Su raja babeaba en señal de su estado de calentura y receptividad. La verga del africano creció hasta las 12 pulgadas con los lenguetazos delicados de mi mujer y su grosor se incrementó un 10 %. ...