Terapia de pareja
Fecha: 01/09/2017,
Categorías:
Intercambios
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... pidió a Olga que citara a su esposo al otro día en horas de la mañana. Antes de despedirse la doctora se paró delante de ella , la despeinó un poco arreglando su cabellera para que quedara suelta, le acarició la cara, la miro a los ojos fijamente y sin mediar palabra se acercó a ella y le estampo un beso apasionado en su boca, se apartó bruscamente , le abrió la puerta y la despidió sin mediar palabra. Olga quedó desconcertada, el beso furtivo la había llenado de interrogantes, aparte de sentir una rara emoción de verse besada por una mujer sintió también que deseaba ser admirada y deseada, esa doctora emanaba un calor especial, una pasión que se salía de su uniforme. Pedro el esposo de Olga era un cuarentón simpático y en cierta forma atractivo, de porte atlético y bastante alto … aparentaba ser un esposo perfecto pero también un candidato para ser un amante fogoso e incitante para cualquier mujer . Igual que Olga fue sometido al mismo tortuoso interrogatorio y también pasó por situaciones embarazosas generadas por preguntas tan íntimas que lo hicieron ruborizar. La psicóloga sólo varió su comportamiento en un pequeño detalle, fue desde el momento inicial mostrando una conducta rayana en un exhibicionismo descarado, la blusa estaba más desabotonada que el día anterior, sus senos estaban libres pues no tenía brasier, su cruce de piernas fue cada vez más repetido y al hacerlo en forma despaciosa dejaba ver su una diminuta tanga que no tapaba nada. Pedro no pasó desapercibida ...
... la actitud provocadora de la doctora y con todo el deseo sexual reprimido por su escasa actividad sexual no pudo contener una erección que a todas luces quedó expuesta ante la psicóloga. Cuando terminó la doctora no sólo repitió el fogoso beso de despedida sino que agregó en esta ocasión una cogida de verga que dejó a Pedro completamente desconcertado. Lo citó para el otro día y le hizo las mismas recomendaciones que a su esposa. Esa noche tanto Olga como Pedro no podían conciliar el sueño, la actitud de la doctora los había llenado de inquietudes. Olga recordaba ese beso apasionado, nunca la había besado una mujer pero la sensación aparte de ser novedosa era altamente lujuriosa. Sería que ella era una lesbiana pasiva que no sabía el intenso potencial de una relación sexual con una mujer? Dependería de esas circunstancias su indiferencia para con su esposo? Pedro estaba casi en las mismas, el comportamiento un poco agresivo sexualmente hablando le indicó que su esposa era una persona frígida, tal vez egoísta que no le generaba un deseo sexual tan intenso como sí se lo generó la doctora . Pedro miró de soslayo en la cama a su esposa , era una mujer muy hembra y no tenía nada que envidiarle a la doctora, pero le faltaba esa agresividad sexual que le llamó tanto la atención…de pronto su esposa pudiera cambiar y se buscarían nuevas oportunidades…. Al otro día Olga siguió las instrucciones al pie de la letra, buscó su ropa interior más atrevida, una lencería de color rojo intenso ...