No hay pedo que te preñe? - Relatos Eróticos

No hay pedo que te preñe?

... pásale. ahí tengo mi catre. pero no te voy a culiar! así que no te pongas jarioso Yo: no pues lo que tu quieras quiero. sin problema! Entramos los dos mirando hacia todos lados para que no nos vieran entrar juntos a la construcción. De inmediato el se recostó sobre la orilla de su catre y se bajó la ropa hasta los tobillos El: órale! pégate chido! no me lamas los huevos porque me dan cosquillas. cuando vaya a salir la leche te aviso! sale?! Yo: ok!! Me arrodile y tomé con ambas manos su pene que estaba erecto al 100%, no era grande ni muy grueso. Ha de haber medido unos 17 cm, no lo pude ver totalmente porque estábamos a media luz. Sentí sus huevos hinchados y peludos, su pubis lleno de pelo y su pene palpitante. Comencé a devorarlo como si fuera el último que fuera a ver. Él sólo decia: Cometela toda!. Pasados 10 minutos el comenzó a jadear y sudar, por un momento pensé que estaba por eyacular, pero como me dijo que me iba a avisar no sabía si de verdad lo iba a hacer. De repente sentí algo amargo y le pregunté Yo: que? ya te veniste? no que me ibas a avisar? El: Nel. eso es sólo lubricante, es que me chorrea chido. jejeje te gusta? Yo: jejej pues mas o menos! Seguí con mi tarea sin detenerme y de repente me dijo El: aguanta wey! ya me dieron ganas de meterte la verga! mamas chingón! Yo: haaa. pues si quiere?! El: pues si. ponte en cuatro en la orilla de la cama. o quieres que ya termine y te los de a comer? Yo: nooo. si, si quiero! El: sale wey! pero no llores ni grites ...

... que mi verga no esta grande y me cagan los putitos llorones, si vas a comer verga la vas a aguantar chido como machin! estamos? Yo: si,claro. jejejej Procedí a ponerme empinado en la orilla de la cama, me bajé la ropa hasta los tobillos y él tomó con su mano su pene y me lo puso en la entrada. El: abrete con las dos manos para que se vaya toda! Yo accedí sin pensarlo y de repente sentí todo su pene dentro y comenzó a meter y sacar rápidamente Yo: Ay! esperate! El: Bueno que verga?! te dijo o no que me cagan los putos llorones?! Yo: Si! El: pues ahora la aguantas, ya estás hasta el tronco y no voy a parar hasta venirme! o le paramos aqui y te vas a la verga? Yo: No! seguimos! El: sale! ábrete toda! Comenzó unas embestidas geniales, al principio era dolor, pero pasando los minutos sentía mucho placer, se notaba que el chico sabía muy bien lo que estaba haciendo. El sólo decía: eso! así cometela!. Aunque no se escuchaban mis gemidos o sus jadeos, si se escuchaban levemente como aplaudían sus testículos y su pubis en mí. Siguió con embestidas tremendas durante unos 10 minutos y de repente comenzó a acelerar el ritmo de manera muy placentera y escuché las palabras que le dan sentido a este texto: El: A la verga wey! no hay pedo que te preñe? Yo: que? El: Si. que si te preño o los quieres en otro lado! Yo: dale con todo! El: sale pues! conste, luego no te quejes porque traes adentro mis chamacos! Y de la nada se detuvo y empujó todo su pene como queriendo atravesarme, estuvo así sin ...