Botellón frustrado
Fecha: 24/08/2019,
Categorías:
Sexo oral
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Ultimo día (jueves) del mes de abril, antes del puente de mayo. Preparamos durante la semana, un botellón con mis amigos en el parque de siempre. Convencí a mi abuelo para que me dejara su furgoneta, para poder ser yo, esta vez, el que lleve las bebidas. Compro bebidas alcohólicas, refrescos, hielo…, y quedo con la gente. Pero se empiezan a rajar: que si uno se va con sus padres al pueblo, que si otro se va a la playa, que si otra va a visitar a una hermana a Mérida, y otro no puede salir porque le han castigado, y otra no viene porque si no va la gente… Total, que me gasto un montón de euros, para que no se presente la gente. Una mierda. A las ocho, en el parque estamos: uno que pasaba por allí a decir que no puede venir porque se va a playa, pero se toma una copa rapidita, mi novia Lidia (Lili para los amigos), su prima Nuria y yo (de una pandilla de once entre chicos y chicas).
Estaba tan cabreado que ni un cubata me tomé. Lili me intentaba animar, puso mi grupo de musica funky favorito, y ni con esas. Nuria mientras, también me intentaba consolar, diciendo que estaábamos los que teníamos que estar, y que teníamos que disfrutar a tope de la noche y del fin de semana largo que se nos venía encima. Al oír eso, recapacite y pensé que llevaba razón. Me fui a poner un cubata y cuando me iba a poner ron, vi que la botella estaba con el culo, que no había ni para cubrir un hielo. "¡Joder!, lo que más me gusta y se ha terminado" dije en voz alta, con tono enfadado, mientras me ...
... volvía hacia las dos primas con la botella de ron en la mano. "¿Y qué pasa, que yo no cuento?" me dijo Lili mientras me plantaba un morreo con lengua delante de su prima. "Si, claro", dije. "Pues bebe otra cosa". ¡Se habían bebido en menos de media hora una botella de ron entre las dos! Estaban muy contentas, risueñas y saltarinas, cuchicheando al oído la una de la otra, cantando y bailando con la música, es decir, se lo estaban pasando genial.
El verlas tan felices, bailando, bebiendo y pasándolo bien, me fue borrando poco a poco el cabreo del botellón de mierda que habíamos hecho, en el que tres personas estaban con un montón de botellas y hielo, en un parque sin casi gente. Y cuando comenzaban a aparecer las primeras sombras de la noche, Lili, tras una tanda de cuchicheos y risitas, se acercó a mí, y con un sonoro morreo con lengua, me dijo al oído: "Estoy caliente". "¿Qué?", contesté. "Mi prima me ha preguntado qué tal eres enrolándote, le he contado a mi prima lo que hacemos, y me he puesto caliente". "¿Qué?", repetí más incrédulo que antes. "Le he dicho a Nuria cómo te chupo la polla y ella me ha dicho que quiere aprender". Mientras me lo decía, veía el cuerpo fino de su prima saltando al ritmo de la música, con el vaso lleno de cubata, y sonriéndome sin parar. "¿Qué quieres haga…?" le dije más perplejo cada vez. "Que hagamos…", me rectificó al momento mi novia. "Nos vamos los tres al descampado, y seguimos allí la fiesta".
La idea no me parecía mala, pero en mi ...