-
Mío, un fin de semana... 3
Fecha: 06/09/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: NenaJoven, Fuente: SexoSinTabues
... estimular los pezoncitos que se endurecen en segundos al tacto de tus dedos. Protesto un poco, no quiero apartar mis labios de los tuyos, pero esa queja se aplacan con el movimiento de tus dedos, que me hace suspirar y entrecerrar los ojos, ese ritmo que llevas me está enloqueciendo, aprieto mi rajita para que sientas la presión, para que sientas como deseo succionarte tan adentro que siempre seamos un solo ser. Elevo un poco mis caderas para que sea mucho más profunda la penetración y así lo siento, como me llenas y como mi rajita empieza a tener espasmos de placer anunciándose un próximo orgasmo Cuando elevo mis caderas tu verga se entierra más profundamente dentro. Continuas con esas suaves caricias que tanto me gustan y con las que tanto disfrutas. Tienes que reconocer, que todas las cremitas que nos ponemos cada día, hacen su función, pues nunca habías tocado piel más suave. La presión de mi vaginita sobre tu verga, la profundidad de la penetración, el delicioso ritmo. Te acercan al clímax. Empiezas a notar los espasmos de mi rajita y su humedad creciente. Sientes que yo también estoy lista. Lo sientes, yo también ambos estamos cerca de ese momento, parece increíble la facilidad con la cual ambos podemos llegar a esa intensidad en ese momento, el cómo rozamos los placeres desconocidos para los simples mortales, la conexión mágica, única. Te acercas me besas, muerdo suavemente tu labio, mis uñas se clavan un poco más y van descendiendo por tu espalda. Te amo, no sabes ...
... cuánto, y como amo estar en ese momento, en esa situación de esa manera Se acerca el momento. Ambos lo sabemos. La sensación es indescriptible. Una mezcla de exotismo y ternura, una mezcla de lujuria y amor sin límites. Con movimientos suaves, profundos y fluidos. Mis uñas van marcando tu espalda es algo que te encanta. Mi dulce mirada se clava en tus ojos y te acerco más a mí. Te pegas totalmente a mí. Quieres tener un contacto total cuando llegue el momento. Acelera sutilmente los movimientos. Me besas con suavidad, me abrazo con ternura. Mi vaginita se contrae con más fuerza arrancándonos suaves gemidos de placer. Falta muy poco para el nirvana. Nuestros gemidos se mezclan, lo poco que se emite pues nuestras bocas absorben esos gestos de placer. Solo se escucha el movimiento perfecto de nuestros cuerpos. Nuestro beso aumenta en intensidad. Mis uñas se aferran a tu espalda provocándote un pequeño ardor, no lo notaras hasta dentro de un rato y los días siguientes, una prueba de esta loca pasión ardiente. Mi rajita se contrae cada vez más, aparto tus labios de los míos por un segundo, te veo fijamente sabes lo que viene, ambos lo sabemos el momento del máximo placer. Con el último beso, intenso, ardiente y apasionado siento cada vez más cerca el clímax. Mis uñas clavándose en tu espalda provocan una sensación extraña de dolor y placer. Por tu cabeza pasa en un segundo las incontables marcas de tu espalda que con tanto orgullo luces cada día. Se acerca. La potente contracción de ...