Un viaje inolvidable
Fecha: 17/09/2019,
Categorías:
Infidelidad
Autor: animafilico21, Fuente: SexoSinTabues
... sabia a que hora iba a llegar a casa (ni sabia si esa noche dormiría en casa) y el en un tono bromista al escuchar esto dice: wou enserio no pierdes el tiempo, después de forma inesperada y de forma inesperada, saca de tu billetera una tarjeta de crédito y me la entrega diciendo: ya que no te viniste muy preparado de Venezuela para acá y como todo caballero paga la cuenta, te soy esto, eres libre de gastarla como quieras. Me aliste y salí al sitio que quedamos, como el restaurante quedaba a unas cuadras, me fui caminando, llegue al restaurante, entre y me puse a esperarla, ambos aviamos dicho como estábamos vestidos para reconocernos, ya que hasta los momentos nunca nos hemos enviado fotos de nuestros rostros (aunque si de otras partes) y como a los veinte minutos llego ella, tenia puesto un vestido azul claro, una medias pantys de color negras y unas sandalias de tacón alto color gris, me levante de la mesa y fui por ella, le pregunte si eran calentita29, a lo que ella dijo que si, nos presentamos diciendo nuestros nombres reales, saludándonos con los típicos dos besos en el cachetes, la invite a la mesa, como caballero que soy le arrimo la silla para que se siente y después la ayudo a acomodarse, ella me lo agradece y yo voy a mi silla e inmediatamente empezamos a hablar, ella me confeso que la excusa que le dio a su marido es que iba a una reunión con una amiga (y si amigos, ella es casada) después pedimos algo de comer. Ahora les describiré como es ella: ella es de ...
... nacionalidad brasileña, algo baja como de 1. 60cm, morena, con cabello rizado de color negro y le llega hasta media espalda, pechugona (y el escote que traía ese día hacia casi imposible que le mirara a la cara) tiene 29 años de edad (por eso el nick) y los ojos son pardos (le cambia a verdes o miel o marrones según su estado de animo). Mientras comíamos el juego de las miradas era muy notorio, además ella sabía que yo seguidamente le miraba el escote de pecho y por debajo de la mesa ella rozaba su pie con mi pierna, en total que después de comer, dimos un pateo por la playa (sin entrar en la arena) curiosamente ese día estaba nublado y no había mucha gente (para empezar por que fue dentro de semana) mientras caminábamos, hablábamos de nuestras vidas personales, me decía cosas que ya me había dicho como por ejemplo que ella siempre tiene ganas pero su esposo no siempre la toca, también hablamos de nuestras experiencias (sexualmente hablando) de fantasías realizadas y de las que nos gustaría. Tan entretenida fue nuestra conversación que cuando nos dimos cuenta ya era de noche, ella repentinamente tomo de mi mano y hablando español pero con su asentó característico brasileño (que por cierto me encantaba su voz) dijo: vamos a otro lado, un sitio más discreto y como mi marido me deposito en la tarjeta, ahora me toca a mí. Fuimos a uno de esos hoteles de parejitas en plan discreto, ella reservo la habitación y luego fuimos a ella, era la suite Tantra, y al entrar quede impactado con lo ...