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Alegrando a un anciano (Parte 2)
Fecha: 21/09/2019, Categorías: Gays Autor: rolf, Fuente: CuentoRelatos
... piernas, lleno de muchos besos los muslos para que Milly poco a poco abriera las piernas y deje a la vista de ese horrible vejete su más preciado tesoro. Los besos seguían subiendo cada vez más hasta que llego a su meta la cual apenas estaba cubierta por un fina tela negra el cual procedió a besar y llenar de babas, Milly apenas sintió la boca del viejo juntarse con su vagina automáticamente cerro las piernas. —¿qué pasa mi chica? —no sé, esto es muy raro —¿es que nunca nadie te había chupado tu cosita? —pues la verdad no don y me siento algo extraña. —déjate llevar noma preciosa vas a ver que te va a gustar, venga abre las piernitas Milly poco a poco abrió las piernas aun con algo de temor, el viejo procedió a besar el monte de venus de la muchacha primero por encima de la fina tela para que la chica agarre confianza, luego de un rato procedió a bajársela lentamente, al principio la muchachita puso algo de resistencia pero el viejo uso su mejor floro y algo de fuerza para que le chica por fin cediera y se dejara bajar su fina tanga hasta la altura de las rodillas, entonces el viejo quedo maravillado, el tesoro de una hermosa joven de 22 años estaba enfrente de él, así que antes de que Milly se arrepiente puso su lengua a trabajar obre ese lampiño y bien cuidado tesoro. Lo primero que hizo es volver a llenar de besos y lengüetazos el monte de venus para luego con su hábil lengua recorrer los alrededores hasta llegar a los labios mayores, la pobre al ...
... principio se sentía algo asustada pero después de un rato empezó a disfrutar de esa nueva sensación y simplemente se dejó llevar. —uffff don esto se siente realmente bieeen —y recién estoy empezando jeje El vejete seguía en su labor pasaba la punta de su lengua cada vez más afondo del tesoro de la chica, hasta que llego al santo grial, el clítoris, el cual empezó a chupar e hizo que Milly diera un gran gemido —¡Siga, siga!… ¡No pare! Siga doncito siga ¡Oh Dios!... El horrible sujeto empezó alternar, primero dándoles grandes lamidas a todo el tesoro de Milly como si de un helado se tratase, las lamidas eran furiosas y eran acompañadas con los leves gemidos de la chica, luego se volvía a centrar en el clítoris y lo volvía a chupar, ese cambio hizo que Milly se ponga más cachonda y con un movimiento involuntario presionaba la cabeza casi pelada del sujeto contra toda su vagina. Don Eulalio reía para sus adentros, sabía que ya la tenía dominada, así que mientras chupaba suavemente el clítoris, metió con bastante facilidad dos de sus dedos debido a lo tremendamente lubricada que estaba la muchacha en esos momentos. —¿te gusta? —¡Uhhh… uhhh… ahhh! Siiii —¿quieres que te lo haga más fuerte? —¡Sí… sí…sí! —jaja me encantas mierda, quien diría que a esta edad encontraría a una mujer tan cachonda como tu —siiiii soy muy pervertida, me gusta ser así, mi mente siempre se imagina un montón de fantasías, pero al momento de querer realizarlas muchas veces me ...