A mis 6 años - Relatos Eróticos

A mis 6 años

... regresaban del trabajo, ósea entre 8:50 a 9:30 de la noche. Y pues todos los días era lo mismo de lunes a viernes, los sábados la mamá de Oscarito se iba a trabajar en una casa por las Lomas y mi mama con otra señora de Polanco, la mamá de Fernando salía a no sé dónde y por lo tanto nos quedábamos con él. Fernando, Oscarito, y yo Víctor, jugábamos tranquilamente en el patio, sin embargo una señora nos quitó porque hacíamos mucho ruido jajaja viejas locas, por lo tanto Fernando nos invitó a su casa y estuvimos con él, pero después de tanta confianza, él empezó a jugar con nosotros de otra forma, no sé cómo lo iba a tomar yo, me dio un poco de miedo, o más bien frustración, no, no nos comenzó a pegar, no nos insultaba, solo nos tomaba de las nalgas a mí y a Oscarito, pero lo que más me sacó de onda fue que siempre decía “me los voy a coger ¿he?”, fue a los 15 días de estar con nosotros. Obviamente, no sabíamos absolutamente nada del tema, eso si, si te metían el pito te puedes enfermar de sida jajaja, o más bien te embarazas y vas a tener hijos, había un mito que decía “las veces que se mueva el hombre, es la cantidad de hijos que vas a tener, mira al perrito cuando coge, se mueve muchas veces y la perrita tiene muchos hijos” jajajjaja, solo mitos o más bien “pendejadas que dice la gente”, pero sí me extrañó mucho esa palabra, “coger”, “los voy a coger” “los voy a culiar” Yo: ¿culiar? Que es ¿culiar? Fernando: te voy a echar pito en tu culo, a ti y a Oscarito, y si no se ...

... dejan los violo “a la fuerza” Solo quedó hasta ahí, no pasó nada ese día, tal vez ya estábamos prevenidos, pero de igual manera seguimos yendo con Fernando a su cuarto. Obviamente tenía ese “temor” que fuera a decir que hoy los cojo o cosas así, y lo más feo es que siempre nos meneaba con sus caderas simulando cogernos, y pues a veces sentía sus bolitas en mis nalguitas, aunque era solo por fuera. Y si, en tan solo poco tiempo Fernando jugaba con nosotros al famoso juego del papá y la mamá, obviamente me tomaba de las nalguitas por fuera del pantalón, no decía nada, solo me dejaba, al igual que Oscarito, solo nos dejábamos, ERA PARTE DE UN JUEGO según, nos daba mucha risa. Toda la semana nos seguía tocando a los dos afuera del pantalón, luego se encogía y se movía como si nos estuviera metiendo el pito a cada uno, a mí y a Oscarcito, nos cosquillaba y nos hacía sentir bien, era divertido. Pienso que nos estaba dando el tiempo suficiente, cuando ya estábamos más allegados a él, nos tocaba sin siquiera jugar al papá y a la mamá. Un día, estábamos viendo una película, la de la dama y el vagabundo, estábamos acostaditos cuando empieza a tocarnos las pompitas, nos empezó a dar mucha risa y en lugar de ver la película nos empezamos a cosquillar, me dieron ganas de ir al baño, y cuando regresé Oscarito ya tenía los pantalones bajados, ahora le estaba tocando las nalguitas de verdad, las de carnitas, Oscarito solo se reía y decía que le daban muchas cosquillitas, Fer: ven tu Víctor, te ...