Mi verdulero calentón. - Relatos Eróticos

Mi verdulero calentón.

Siempre, desde chico tube inclinación por mi propio sexo pero nunca pasó más que de un juego con chicos de mi edad, ya en mi adolescencia tenía alguna amiguita pero en el fondo me gustaban los chicos, era un chico más bien tirando a gordito, de tez blanca, con la cabeza llena de rulos largos hasta los hombros, no era bajo, tenía muy lindo culo, y por la gordura mis tetillas se notaban bastante. Como cualquier adolescente nunca quería hacer nada de lo que me pidieran mis padres, un día mi madre me obliga a los gritos que le haga un mandado a la verdulería y arregañadientes fui. Cuando llegó a la verdulería había un montón de señoras esperando y al verme el verdulero dice -por fin un poco de carne fresca- y todos se ríen, yo me sonrió y me sonrojo, mientras esperaba el tipo me miró varias veces, hebra grandote, pelado, estaba transpirado, con una musculosa y un plántalo mugrientas. Me toca el turno, estábamos solos, saco la lista que traía, -pepinos- le pido, -justo- dice el, y se ríe, no entendía pero me río igual, lo último en la lista eran las bananas y ya empese a darme cuenta del chiste del tipo, -bananas- - ja, no perdonas una nene- me río, cuando le pago me toca la mano yo la retiro y me voy con vergüenza. Esa noche en mi cuarto mi cabeza empezó a dar bueltas, la mirada, las cosas que me dijo, como me toco la mano, por primera vez en mi vida se me presentó la oportunidad de estar con un hombre, no savia que hacer, estaba muy exitado, me hice una paja y otra paja hasta ...

... que me dormí. Era verano y en casa no había mucha plata por lo tanto nada de vacaciones, me levanto tarde pero pensando en el verdulero, no savia que hacer, agarro la bici y empiezo a pasar por la vereda de enfrente haciéndome el distraído, el tipo estaba atendiendo y ni bola, me voy a la casa de un amigo y pasó un buen rato jugando con la compu pero siempre pensando en el verdulero, ese día pasó sin novedad. Al otro día mi madre me pide ir al almacén y la verdulería, mi corazón latía acelerado, y mi madre no podía creer que fuera sin chistar. Primero al almacén pasó por casa, dejó las cosas y camino a la verdulería, que exitacion tenía, cuando entro había un señor comprando, él se da buelta y me mira de arriba a abajo, yo lo miré y baje la vista, cuando me toca a mí estábamos solos, -queres pepinos?- me pregunta,- no hoy quiero papas- le contestó m dio tartamudeando, -que lastima porque hoy lo tengo especial- y se ríe, él se da cuenta que estoy medio conjelado, - porque no te venís después del medio día - - para que - le preguntó, -para mostrarte el pepino- - no se - y justo entra alguien, me voy. Comí y le digo a mama que me voy al club, camino hasta la verdulería y la l estaba en la puerta esperándome, - veni que tengo el pedido de tu mamá- me dice para disimular mientras cargaba cajones en la camioneta, entro a la verdulería el termina de cargar, entra y cierra- hola bebe pasa al fondo que voy a comer algo- me pregunta cómo me llamo y me dice que soy muy lindo, yo mudo, en ...