Perra Estupida 1 - Relatos Eróticos

Perra Estupida 1

... auxilio, fue inútil el animal se abalanzo sobre mi derribándome al suelo con fuerza. Gruñendo ferozmente, me tomo por detrás, agarrando los tirantes de mi vestido y empezó a jalonearme de un lado a otro, mis gritos se ahogaban con sus gruñidos y ladridos, estaba desmadejada en el suelo a merced de aquella enorme bestia quien me restregaba de un lado a otro con fuerza nunca antes vista por mi, el minivestido se me subió hasta la cintura y la tanga se me desprendió por la fuerza de la fricción de mi cuerpo contra el suelo lodoso, de repente se quedo quieto cuan largo y alto que era, dominante, encima de mi, olfateando, escuchaba su olfateo aun a pesar de la lluvia, pasaron algunos minutos sin saber porque se habia detenido, retire mis brazos de mi cara pues me había cubierto con ellos durante el ataque, intente pararme pero el animal gruñía con fiereza con cada movimiento que intentaba por liberarme, asi estuvimos por un momento, intentando adivinar que se proponía hacer, de pronto empezó a olfatearme la cara, los hombros, su asqueroso olor empezó a entrar por mis narices no pude soportar más quise incorporarme pero con fiereza y autoridad me derribó de nuevo al piso, siguiendo con su tarea de olfatearme, empecé de nuevo a llorar, no sabia que hacer mientras sentia como iba bajando poco a poco con su narizota en mi cuerpo despacio, hasta llegar a mi entrepierna, ahí empezó a olfatear con fuerza, por instinto cerré las piernas pero el animal me mordió el hombro presionando ...

... entonces fue que tuve que abrir las piernas, me tomé del hombro pues me había lastimado de verdad, voltee a ver si me había abierto alguna herida cuando sentí su lengua en mis nalgas, larga, tibia, rugosa, después en mi entre pierna, lamia rápidamente como los animales de su raza, cuando llego a mi vagina por detrás Intente pegarle con mis pies para liberarme sin embargo no le importaba, lamia y empujaba su lengua con fuerza, _nooo¡¡¡¡¡ que haces¡¡¡¡¡¡ suéltame¡¡¡¡ le gritaba, pero era inútil, el animal lamia y lamia aun con las piernas cerradas, por un momento la lucidez vino a mi mente recordando a la estúpida perra que me había embarrado de su aroma, quizá por eso lo hacia pensé, asi que mientras el animal estaba entretenido como pude me quite el vestido y lo aroje lo mas lejos que pude, sin embargo el no se iba, al contrario seguía lamiendo como intentando vencer mi resistencia, al ver que no lograba que abriera las piernas colocó sus enormes patas delanteras por detrás de mis brazos inmovilizándome, al parecer se había calmado, pensé, sin embargo empece a sentir como algo me punteaba la cadera, algo tibio, liso, pasaba y me rosaba la cadera, las nalgas, las piernas, quería copular¡¡¡¡¡ quise safarme al ver lo que quería hacer pero el animal me tomo del cuello con sus enormes quijadas gruñendo como indicando que el era el que mandaba aun con su enorme hocico en el cuello no dejaba de puntearme, me imagino que con su cosa, me sentía embarrada de algo y esa cosa punteándome sin ...