Roberto y la profesora de mates - Relatos Eróticos

Roberto y la profesora de mates

... enormes , pero no le disgustaron.Raquel se dio cuenta de que mientras hablaba Roberto estaba como distraído y cuando levanto la cabeza para mirarle, le descubrió mirándole las tetas. Hizo como si nada y siguió con la explicación. Le resulto raro que Roberto se fijara en sus tetas, la verdad es que ella sabia que no eran muy grandes pero se sentía orgullosa de que siempre que su novio la pedía una cubana ella podía hacérsela sin problemas, aunque esto ya no ocurría demasiado. Hacia unas semanas que su novio ya no la tocaba y sospechaba que la estaba engañando. Ya fuera bien por sentirse otra vez devorada por los ojos de un tío o bien porque llevaba semanas sin una verdadera polla dentro de ella, se echo hacia delante un poco para ver el enorme bulto que se le estaba formando a Roberto en los pantalones y empezó ha mojarse entera. Intento aguantar hasta que acabo la explicación y le pregunto a Roberto con la voz mas sexy que pudo:Raquel: Te ha gustado la explicación.- Roberto se quedó bloqueado un momento pero le dijo:Roberto: Si ahora ya lo entendí, gracias.Raquel le sonrió de esa forma que tanto excitaba a Roberto y en una última jugada se giró y dejo caer el lápiz con el que había acompañado la explicación. Inmediatamente se agacho para recogerlo y dejarle ver a Roberto toda la parte trasera de su anatomía femenina. Sabia que se quedaría embobado mirándole el culo, igual que pasaba con todos los tíos con los que había estado. Todos adoraban su culo y hacer guarradas ...

... con el y ella las disfrutaba, así que con el paso de los años había aprendido a llevar los pantalones un poco sueltos e ir enseñando un poco la raja de su culo. Recogió el lápiz y anunció a la clase que tenía que hacer un recado y que siguieran trabajando. Salió y se fue lo más rápidamente que pudo al baño de profesores, tranco la puerta y se metió la mano en los pantalones. Tal y como pensaba estaba completamente mojada así que se bajo los pantalones y las bragas y empezó a masturbarse pensando en como alguien tan joven como Roberto tenía semejante trozo de carne entre las piernas. Dejo de masturbarse el coño y empezó a meterse varios dedos por el culo hasta que empezó ha caberle casi toda la mano. Ella era una experta en el sexo anal y sabia perfectamente como tocarse para disfrutarlo tanto o más que el sexo vaginal. Entre eso y pensar en la polla de Roberto se acabo corriendo y volvió a la clase al cabo de 5 minutos.Ese día a la salida Roberto se quedo charlando con unos amigos y decidieron que se irían a comer al centro. Cuando iban ha salir del recinto se dio cuenta de que olvidaba el libro de lengua, así que pidió a sus amigos que le esperaran y subió a búscalo. Al bajar no encontró a sus amigos por ningún lado. Los muy cabrones se habían ido sin el. Rápidamente les llamo y le dijeron que empezaban a tener hambre y que por eso se fueron y que le esperaban en una hamburgueseria del centro. Mientras acababa de hablar vio a Raquel bajando para irse también del colegio. ...