De Niña a Mujer
Fecha: 06/11/2019,
Categorías:
Erotismo y amor
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... que estaba totalmente de acuerdo,, (Nuestro matrimonio algo típico de muchos,, sumido en la rutina y la monotonía en el tedio y sin diferencias,,, y vaya que error),,, una vez Lizbeth se me acerca a mi escritorio cuando redactaba un diagnostico para un posicionamiento Marketing de la línea de unos productos comerciales y me pregunta en curiosidad que era lo que hacía,, tomándola y colocándola en mis piernas, luego explicándole, que al son de la música de bachata ella comenzó a mover al contorno de las notas musicales, lentamente fue deslizándose hasta que se situó en el centro de mi engranaje masculino,, ella ya a su edad, experimentaba sensaciones excitante y químicas,, pues cuando dejaba fluir su son musical al compas del movimiento sus manos para no perder el equilibrio se posaban en mi pantalón sobre mi enorme herramienta que estaba contenida sobre dos capas de espesor en tela la del pantalón y la del pantaloncillo, ella lo notaba, y cuando al deslizarse encajo sobre el centro sintió algo duro,, que le revelo la risa, de lo que le cuestione y me respondió, que había algo duro que se levantaba debajo de ella, y le respondí que era natural que un hombre guste de una mujer y que sucedan cosas como las de esa dureza,, ella sin mediar palabra alguna continuo con su movimiento rítmico en un vaivén que yo le facilitaba muy lentamente con la fuerza de mi virilidad peneal, luego de unos dos minutos, le pregunte si estaba cómoda y que si quería irse a jugar con los otros niños lo ...
... que me respondió que no y que quería quedarse ahí toda la tarde, ese momento fue allí, donde comencé lentamente a acariciarle su cabello, su bello cuello, un beso en su mejilla, luego otro en la oreja, luego otro en la nuca, luego con una de mis manos, lentamente comencé a acariciar sus piernas, y luego pase a sus glúteos,, que luego lentamente, le fui levantando su vestido adornado de encajes, ella, sin molestarse, suavemente y percibiendo mis suaves caricias, poco a poco me fue permitiendo al abrir lentamente al compas del movimiento de mi mano en la búsqueda de su sexo, me fue aceptando abriendo sus piernas hasta el punto cuando pude palpar sus tanguitas, de ello, Susana en las compras que realizaba con Alberto le compraba tanguitas y ropa interior sensual, que mas tarde ella misma Susana me rebelo, como parte de innovar y de permitirle según ella de que Lizbeth estuviera en la actualidad de la moda y que le gustaba tanto como ella Susana lo disfrutaba al usar estas prendas de lencería,, que luego compartía con Alberto y le enseñaba por su propio criterio a que Alberto es un hombre clásico, modesto, sobrio, soberbio con esta clase de prendas, Susana me relataba que para que accediera ella misma organizaba una exhibición familiar de las marquillas de ropa y antes de lucirlas al publico lo enseñaba Alberto, quien decidía si continuaba su uso o lo rechazaba, y bueno ya era normal modelar para los hombres de la casa estas lencerías,, que no pasaban más de un si me gusta ò un no ...