Alicia 21/25
Fecha: 20/11/2019,
Categorías:
Hetero
Autor: evloguer, Fuente: SexoSinTabues
... de las manos y el monstruo latía como jadeando. Alicia quiso desvestirla toda para que no se le arrugase la pollerita, pero yo quería hacer las cosas lentamente. La dimos vuelta con la pancita sobre la cama y le arreglé el cabello poniendo su carita de costado, no me pude resistir y le planté otros besos en la boquita. Tomándola de los pies, mi nena le separó las piernas y quedó bastante despatarrada, por suerte era bailarina y lograba abrir las piernas casi totalmente. Esas piernas eran fuertes, era evidente la gimnasia que hacía la nena, esas piernas terminaban en un traserito bastante prominente, se adivinaban las formas de su trasero debajo de la pollerita. Me senté medio arrodillado para tener bien a la vista esa colita y esas piernotas que se metían debajo de la pollerita tableada, mi cielito se afanaba en sacarle las medias y me daba chirlos en el trasero que apuntaba hacia ella. Se entretuvo largo rato tocándole los piecitos y tratando de hacerle cosquillas, aveces los mordía y terminaba chupándole el dedo gordo con movimientos como si tuviese otra cosa en la boca. Yo recreaba mi vista con aquella espalda que acariciaba arriba y abajo, sacándole de apoco la camisa que estaba apretada con el cinturón de su polllerita. Mis manos ya podían pasar sobre sobre la ...
... piel de su espalda por abajo de la camisita y bajaban hasta su cola, el ruedo de la pollerita también lo estaba subiendo de a poco y descubriendo aquellas pompas duritas. Tenía una preciosa bombachita rosa medio transparente, como tenía las piernas separadas podía ver bien aquella ranurita delantera que marcaba la trasparente tela. Ese tajito llamaba a los gritos a mis dedos y la colita también. Tuve que dedicar una mano a cada tarea y mientras pasaba un dedo por el hachazo amasaba esos glúteos infantiles. Alicia me quería sacar de ese estado embobado en que estaba a masajeando a su compañerita y me metió un dedito por atrás, la cochina casi me ensarta de no ser por mi agilidad para levantarme mientras sus risitas le hacían sacudir los hombros. La tuve que agarrar de allí y darle un tremendo beso para que se calmase mientras ella me tironeaba la gallina pelada. Decidimos desvestir a Martita para conservar sus ropitas planchadas. Yo la quería dejar en bombachita pero mi nena se la bajó de un tirón, en cambio le volvió a poner las medias blancas que tapaban casi sus pantorrillas, tenía buen gusto estético mi hijita, quedaba muy sensual así. Para eso es mi reina, mi adorada reinita que llena mi vida, vida vacía si no fuese por esas divinas letras: ALICIA (continuará)