Fantasía cumplida por una tarde
Fecha: 26/11/2019,
Categorías:
Confesiones
Autor: tahitiana, Fuente: CuentoRelatos
Esta vez me atreví a ir mas allá de mi cuarto y salgo a la calle...
Una tarde de enero del 2016 tuve que salir de mi ciudad a una muy cercana como a una hora y media en auto. ya andaba con el usar mis deliciosas prendas y sentir la tanga en mi colita y ponerme la mini que compré. Cuando supe que haría ese pequeño viaje me vino a la mente el irme vestida sexy, así que subí a mi cuarto, me rasuré las piernas, me puse una tanguita roja de lycra y una fiusha con negro encima de la roja, esa combinación hace que el triangulito de la entrepierna se vea delicioso porque la fiusha es de encaje. Me puse la mini y un brasier negro encima me vestí una playera polo y unos jeans para salir de casa.
Tomé la minivan y salí de mi colonia, tan pronto me alejé me detuve en una papelería a comprar dos globos que rellené con arroz para hacerme unas bubis hermosas. Le puse una canica a cada globo para simular pezones levantados y se me veían muy apetecibles esas chichis, cuando me las puse dentro del sostén ya cuando me sentí lo bastante lejos de mi casa me detuve y me quité los jeans, me acomodé un poco la mini y seguí mi camino. Me gustaba pasar junto a los autobuses de personas para que los mirones me vieran las piernas y el calzoncito, eso me excitaba mucho y muchos lo hacían. Me sonreían y algunos hasta se agarraban el bulto y me lo ofrecían, yo solo les sonreía y continuaba mi camino, al llegar a la caseta de peaje el cobrador me miró, sonrió y al darme el cambio no quitaba la vista ...
... de mi calzoncito y piernas, le dije —gracias —y me dio el cambio acariciando mi mano sutilmente, sonreí y me fui así seguí provocando a los usuarios del transporte hasta que ya iba sola en la carretera.
Como a media hora antes de llegar, encontré un supermercado donde me detuve a comprar más tangas, soy adicta. Ahí detuve la camioneta lejos de otros autos, ya estaba oscureciendo y me dio confianza bajar en faldita, así que bajé y me agaché muy sexy pensando en que alguien podía verme. Me quedé unos segundos enseñando la cola y las tangas, ya que la minifalda es muy corta y luego me puse los jeans, me quité las chichis y me dirigí hacia la tienda.
Fui directo a la ropa interior y una chica me pregunto si necesitaba ayuda, le dije que sí, que buscaba tangas de mi talla, ella sonrió y me las enseñó, me escogió dos y me dijo —éstas están en oferta y se te verás muy linda. Sonreí y las tomé, ella me echó una sonrisa pícara y me dijo si necesitaba medias, le dije —claro por qué no —me dijo —está por allá. Al darme la vuelta me dio una nalgada y me dijo —vamos. Eso me excitó tanto que la dejé pasar y al estar atrás de ella le pellizqué la cola y le piqué el ano. Ella gimió y caminó, me dio un pantiliguero y se agachó pegando su cola hacia mí, me acompaño a pagar, se despidió con un beso en la comisura de mis labios y se fue. Yo salí con unas enormes ganas de usar mis tangas nuevas y mis medias súper sexys. Fui a la camioneta, la abrí por la puerta lateral y me subí, me quité ...