Mi mujer me compartió con su amiga. - Relatos Eróticos

Mi mujer me compartió con su amiga.

Esto sucedió el verano pasado y fue una sorpresa para mi, ya que descubrí algo que no sabía sobre mi mujer.Tenemos una amiga que siempre ha estado junto a nosotros. De hecho mi esposa y ella fueron juntas al colegio de pequeñas y siempre ha estado muy unidas y hasta hemos sido vecinos en el mismo edificio. Ella es viuda desde hace 5 años y desde entonces siempre nos ha tenido como apoyo principal en todo. Este verano pasado nos invitó a su casa en un pueblo a pasar un fin de semana para salir de la rutina de la ciudad. Íbamos a estar los tres solos puesto que tanto nuestros hijos como el suyo tenían planes más divertidos que estar con nosotros.Llegamos, organizamos todo y nos fuimos a bañarnos al río. Cuando volvimos a casa nos duchamos y decidimos ir a tomar algo al bar del pueblo. Allí comenzamos a tomar cervezas y nos fuimos entonando los tres. Volvimos a casa a cenar en la terraza y seguimos bebiendo mientras lo preparábamos todo. Llegó la sobremesa y abrimos alguna botella de cava. La noche era bastante calurosa y el efecto del alcohol estaba calentando el ambiente. Como no, salió el sexo a la conversación y mi mujer dijo que con los hijos de vacaciones y siempre con la casa llena de gente echaba de menos follar a gusto y sin tener que esperarse a que todos se acostasen. Esto me sorprendió puesto que mi mujer es muy recatada hablando de sexo. Su amiga riéndose dijo que esta noche podía hacerlo a gusto, aunque le pondríamos los dientes largos ya que llevaba más de cinco ...

... años sin follar. Yo estaba flipando con la conversación puesto que era muy inesperada. Mi mujer la miró y le dijo que si quería podíamos follar los tres, que se acordaba de cuando jugaban de pequeñas a escondidas. ¿Como?. ¿Que jugaban de pequeñas?. Yo estaba más alucinado cada segundo que pasaba. ¿A que jugabais? les pregunté. Nos desnudábamos e íbamos por la casa haciendo cositas, me contestó mi mujer mientras se reían las dos. No me lo creo, contesté yo. Mi mujer se volvió a su amiga y le preguntó si quería demostrarmelo y ella, que ya iba bastante subidita por el alcohol y la conversación dijo que si. Pero que fuesen dentro a por otra botella de cava y saldrían enseguida. Entraron y yo me quedé riéndome puesto que estaba seguro de que era una broma que me estaban gastando. Al ratito me gritaron desde dentro si estaba listo y yo dije que si esperando que saliesen con alguna broma. Y no fue broma. Salieron las dos desnudas y abrazadas viniendo hacia mi. ¿Que haces vestido? me preguntó mi mujer. En dos segundos estaba desnudo y con la polla erecta. Me llevaron a un sofá de mimbre y me tumbaron. Parecía que lo tenían ensayado. Mi mujer comenzó a chuparme la polla mientras que su amiga me puso el coño en la boca. Comencé a comerselo y se corrió en un minuto gimiendo y temblando. Llevaba tanto tiempo sin disfrutar que se corrió tres o cuatro veces. Mi mujer me había puesto un condón y le dijo a su amiga que era hora de volver a meterse una polla en el coño. La verdad es que nunca ...