Don Isauro un pervertido Tendero. Parte 1ª.
Fecha: 23/12/2019,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: sexigaleno, Fuente: SexoSinTabues
... ¡mejor mañana venimos a ver las otras que nos dijo don Isauro! Angie. - - - - Oye Brecia ¿no sentiste a don Isauro en tu cola, cuando salíamos de adentro de su tienda? ya que yo sentí que se me repegó en la mía al salir y bien que sentí que tenía su banano parado, ya que me lo encajo entre mis nalgas. Brecia. - - - - Ándale eso te iba a preguntar, ya vez que me salí primero, ¿yo creí que era su celular?, el que me rozó mi colita, ¿a poco a ti también te repegó eso? Angie. - - - - Sí manita, y bien que se encajó entre mis nalgas, yo sentí y eso que fue unos segundos, pero se siente, que lo tiene grandote, yo me hice la disimulada, ¡pero de que lo sentí bien grande, lo sentí!, ¿bueno ya mañana veremos cómo se comporta con nosotras? Durante el tiempo que restaba, para concluir el día de clases ambas chiquillas se hacían pensamientos acerca de lo que verían en otras revistas al día siguiente, pero en sus mentes ya estaban maquinando, cómo provocar a don Isauro, para ver su comportamiento hacia ellas, a la salida de clases, pasaron a la tiendita y compraron una agua embotellada, pero les faltaba, para pagar la misma, y don Isauro, atento con esas nuevas “amiguitas”, les dejo llevar el producto y que otro día le dieran el resto, pero muy atento se acercó al refrigerador y tomó otra igual y se la extendió a Angie, diciéndole que esa era para ella, sin costo alguno, las chicas agradecieron ese gesto, se despidieron y prometieron venir al otro día, como ya habían quedado, el tendero ...
... se salió a la puerta a despedirlas y observar que se alejaban platicando entre ellas, pero su mirada se perdía entre el sexi cadencioso caminar de Angie, que a cada paso ¡una nalga subía y la otra sincronizadamente bajaba!, era un espectáculo ver a esa chiquilla preparatoriana caminar, hasta que se perdieron del alcance de la vista del tendero que se acariciaba el pene sobre el pantalón y pensando lo del día de mañana, con esas chicas viendo unas revistas pornográficas tras el mostrador de ventas, o con suerte en la trastienda que era un especie de bodeguita. Entre los múltiples pensamientos que se hacía Isauro, respecto a dónde las chicas verían esas revistas, una idea perversa le taladró la masa encefálica (sesos), cerró esa noche dos horas antes de lo acostumbrado, hizo su corte de ventas y compras, lleno sus refrigeradores con los productos para el otro día, hizo su lista para sus proveedores, se fue a la trastienda a acomodar las insumos que embodegaba e hizo un espacio de 2 mt2 aproximadamente, limpió ese lugarcito con mucho esmero, deshizo en polvo una tableta de desodorante para baño y la regó en las esquinas de ese espacio que de paredes eran cajas con contenidos de aceite y otros, fue a bajar una camita individual que tenía la cual acomodó en ese espacio la vistió con ropa de cama perfectamente limpia y puso una cortina en un palo de escoba, para que se sintiera una privacidad dentro de ese espacio, fue por una radio-grabadora de casete que le habían empeñado y le ...