-
Yo 16, él 51
Fecha: 16/01/2020, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... pero al fin me cogió suavemente por los hombros, me acercó y me besó. Yo empecé a abrazarlo y a meterle la mano por dentro de la camisa y a acariciarlo. Poco a poco le fui quitando la camisa que llevaba casi desabrochada porque hacía calor. Entonces él me sacó la camiseta de tirantes que llevaba puesta y me acarició el pecho. Yo hacía lo mismo. Él tiene algo de vello, pero no mucho. Y empecé a besarle el pecho y lamerle los pezones y besarle en el cuello. Le fui acariciando su paquete que estaba muy duro y él hacía lo mismo con el mío. Me bajé las bermudas, me quedé con el calzoncillo tanga nada más. Él me decía que no había visto nada más excitante en su vida. Fue besándome desde el pecho hasta llegar a mi ombligo y empezó a lamer mi vientre hasta llegar al tanga. Entonces yo me lo bajé de golpe y me quedé desnudo ante él. Luego cogí su pantalón corto y se lo desabroché. Volvió a decirme si estaba seguro de lo que quería hacer. Le dije que sí, que ya no me importaba nada y comenzó a chuparme la polla y yo estaba que alucinaba. Luego empecé yo a hacer lo mismo. Le dije que no me penetrara, que no me gustaba y él me dijo que no pensaba hacer nada que yo no ...
... quisiera. Así estuvimos un rato que se me hizo a la vez corto y largo por lo que estaba disfrutando, hasta que ya no pude más y me corrí en su mano mientras él me masturbaba. Luego yo seguí mamándole la polla hasta que él se corrió echando todo su semen sobre mi pecho.Yo había estado alguna vez con colegas de mi edad, pero esto no tenía nada que ver con aquello. Nadie me había tratado con ese cariño.Esta fue la primera vez. Tardamos en vernos un par de semanas y desde entonces yo iba a su casa cada tres o cuatro días y cada vez era mejor, siempre con la delicadeza suya y a la vez el morbo que me daban sus formas educadas y su cuerpo maduro pero fantástico.Al terminar el verano regresé con mi familia a la capital. Él vive en una zona residencial y yo sigo yendo a su casa desde entonces. Es el amor de mi vida y me estoy preparando para darle el disgusto a mis padres y decirles que me voy con él, porque saben que soy gay, pero no han acabado nunca de creérselo. Acabo de cumplir los 18 y estoy ya en la Universidad, haciendo Literatura que es lo que me gusta. Pienso irme a vivir con él y espero que las cosas no cambien nunca, aunque nuestra diferencia de edad sea tan grande.