EL OBSERVADOR - Relatos Eróticos

EL OBSERVADOR

... salido de los caminos llevabamos andado desde el lugar, unos 200 metros, nos metimos en los arboles le dije. - Creo que aquel es el coche de l azorra a que viene a buscarte - Como sea me la follo otra vez - Vamos hacia atrás, por si acaso. Caminamos ya fuera de la vista del coche viendolo nosotros, a ver a donde iba, lo vimos pasar cerca, s era un clio y seguro era la "gordita", caminamos mas aprisa al ver que se dirigia a aparcar donde antes, la vimos salir del coche, si el mismo chandal, el chico iba delante de mi, dejé la bicicleta en un tronco a unos 50 metros, seguimos por los caminos dentro de los árboles, hasta que el chico paró, aún escondido, paré a su lado, mmmmmmm la "gordita" estaba tumbada en los cartones donde antes habia sido follada, tenia ya quitado los pantalones se tocaba las bragas las piernas abiertas, nosotros a unos 5 metros escondidos, se escuchaba un flojo gemido de ella al respirar tocandose, el chico salió, ella se dio cuenta casi al instante miró al lugar. Se acercó ella se arrodilló, bajó el chandal del chico se comio se polla, se dejó quitar la parte superior por él, se quitó el la parte superior, ella tiró de la verga con la mano hasta que el chico, se sentó apoyando parte de su espalda en un tronco quedando inclinado hacia atras la gordita, se subió encima ella mismo se metió la polla él la agarró por las nalgas primero despues empezó a darle azotes así ella cabalgando entre gritos, ya, de ...

... nuevo, culebreó encima de él, se retorcia de gusto, hasta que quedó quieta clavada en su verga, él la tenia apretada las nalgas, ella hipaba gimoteaba, escuché como besaba su mejilla, él la consiguió apartar, la puso a 4 patas la gordita se ofreció totalmente, él se la metió, la agarró por las caderas comenzo a follarla, con lentitud, ella al poco estaba gimiendo, de nuevo vi la follada un gran semental, de un nuevo semental, se la follo largamente, sin dejar ella de jadear de gimotear, de moverse de pararse tras los jadeos de él seguir imperterrito, dandole la "montada", asusandola a veces con un azote, en una palabra "la reventó", termino pidiendole que no podia mas, que estaba "reventada" de follar, él aceleró las metidas, se corrió, se la sacó, ella quedó sobre los cartones extendida rendida, él aun le puso la verga en la boca, ya mas blanda ella la recibia la punta en su boca, hasta que él paró. Se vistieron él le dijo que habia venido andando y ella se brindo a llevarlo, se despidieron de mi, fui a buscar mi bicicleta, me fui, vi delante mia a lo lejos el coche, fue la última vez que los vi, nunca mas he visto por alli ni al chico ni a la gordita. La gozada que me brindó ese chico, fue increible, si hubiera vuelto una y otra vez, cuando se hubiera dado a conocer a las zorras estoy seguro se hubiera hecho "el dueño" de la mayoria de ellas, que se le va a hacer, esta es la experiencia mas excitante que he vivido como mirón.