manoseada en la biblioteca - Relatos Eróticos

manoseada en la biblioteca

... sin decir nada continuó con la lectura.No es hermoso miss Rosie el coño peludo de Lizziy? — bajo la pesada lana mis dedos jugueteaban con sus pezones frotando y pellizcando, mezclando las caricias con atisbos de dolor.Mientras el cristalino de sus ojos se humedecida un poco mas alimento el cosquilleo que ya me dominaba.Ella se detuvo y ya me detuvePor favor— dijo sin mirarme —abajo.Entonces lo seguí mis manos pasaron de sus pechos rodando por su estómago y llegando a la selva de su pubis.Mira si es como el de Lizziy— Dije nuevamente ,con esa vos la iba y burlona, sin apartarme de su espalda, al momento que colocaba mi pija dura pija entre sus nalgas.Ella se agitó buscando mi cuerpo y el rubor calentaba sus oídos que ya había mordido suavemente con mis labios un par de veces.Sin nada que se interpusiera entre mi piel y su piel, baje mis llemas buscando su entrada y encontré la perla excitada apenas cubierta por sus pliegues suaves,Rose sus labios apretando la piel contra la perla y ella como azotada por una convulsión eléctrica se estremeció en mis brazos.Sigue!—dije llenado mi mano con la tibieza su sexo, cubierto de vellos mesclados con humedad, que los bañaba copiosamente.Métemela en la boca mi amor!— Dijo soltando su cuerpo su espalda cayó sobre mi pecho y el contorno de su trasero apretó mi erección mientras ella me ofrecía su cuerpo.Saque mi dura pija de entre mis pantalones y levanté la falda, buscando encontrar su raja, ella movió su cadera buscando mi hombría y en un ...

... criterio erótico penetre en su intimidad, ella suspiró y arqueó su espalda yo bese su cuello y olí su cabello.Te juro que se ha metido la más de la mitad del nabo en la boca— dijo risueña mientras yo empujaba contra su cuerpo,sus pliegues calientes y se taperujaban contra mi pija con frenesí comisión quisieran devorarme.Cada palabra que salía de su boca yo batía con más fuerza mi cadera, la lectura se detuvo nuevamente y el sonido acuoso de nuestros sexos chocando fue lo único que se oía en esa biblioteca.No sientes como te penetra— dijo rompiendo el silencio al tiempo que levantaba su culoOh sí siento que me entra!!— Siguió mezcla de gemido y grito, eso me excito más y empuje su cuerpo completamente contra la mesa, su rostro cayó sobre las páginas del libro y su aliento furioso resoplaba contra las hojas que sonaban la compás de mis embestidas.Que te entra?— dijo entre gemidostu polla tu polla me entra muy profundo métemela más y más adentro córrete en mi.Sus gritos ya hacían echo en los estantes mientras ella meneaba su cadera, golpeando contra la mía ruidosamente y mis brazos de aferraban a su vientre empujando contra ella.Los dos moviéndonos violetamente, ambos sumidos en el cuerpo de otro.Y su vagina dulce y cálidamente se apretó contra mi virilidad hirviente, explotó en el éxtasis mientras su cremosa y cálida corrida escurría entre sus muslos y los míosYo reventé en su vientre y derramándome en ella, mientras mi pija era succionada hacia el interior de su sexo.Ella se ...