1. LA INFIDELIDAD DE MI ESPOSA


    Fecha: 30/01/2020, Categorías: Infidelidad Autor: iccs, Fuente: SexoSinTabues

    Hola, somos un matrimonio, casados hace 26 años. Tenemos: 53 años mi esposa que se llama Sonia y yo 58 y me llamo Jorge, vivimos en la capital, y la verdad es que con mi esposa la intimidad siempre fue muy buena. Ella mide 1.70, es delgada, y tiene un cuerpo muy bien conservado. Nos conocemos muy bien en la cama y siempre disfrutamos de maravilla. Sin embargo, en el último año toda esta situación de quejarse y poner condiciones para estar en la intimidad me fueron aburriendo y decidí hacerme el indiferente ya que en varias oportunidades las cosas terminaron haciéndome sentir mal. Ella debo reconocer que a pesar de su edad es una mujer atractiva, nunca se ha hecho cirugías, todo es natural y enfundada en vestidos sueltos, descotados, ajustados, un poco más largos o cortos, todo le quedan bien, y las faldas en especial por que tiene unas piernas hermosas que atraen frecuentemente las miradas, mucho más si la falda es corta. Y para evitar malos momentos ignorarla fue el camino, pero pasadas varias semanas me dijo… No me has vuelto a buscar. No le expuse la verdadera razón, simplemente le dije que tenía mucho trabajo y terminaba muy cansado. Y más adelante cuando ella me buscaba, la evadía con cualquier pretexto de manera que pasaron varios meses sin que existiera ninguna intimidad. Como yo la conocía bien notaba que su genio se le fue deteriorando por falta de sexo y cualquier motivo era base de discusión, pero decidí tomarla suave hasta que un día nos invitaron a una fiesta en ...
    ... un club y ella se tomo algunas copas y sabiendo que cuando esto sucedía su libido se le alborotaba, yo continúe siendo evasivo, cuando quiso bailar saque cualquier excusa y fue evidente su mal genio. Esa noche en la fiesta estaba Rafael, una persona de quien yo no soy muy amigo, pero sabía que a él siempre le había atraído mi esposa y el viendo que ella no bailaba se acerco a invitarla y me pidió permiso, desde luego le dije que sí. Ellos bailaron durante unos 15 o 20 minutos y cuando ella volvió a la mesa le planteé que regresáramos a la casa con la disculpa que estaba cansado, eran pasadas las doce de la noche, y ante mi propuesta Sonia se enfureció al punto que me dijo, si estas muy cansado puedes irte a dormir, yo quiero disfrutar la fiesta y me regreso en un taxi. Acepte la idea y me retire del club, salí en el auto y a pocas cuadras decidí regresar con la intención de averiguar que iba a hacer ella estando sola. Deje el auto nuevamente en el aparcadero y entre por una puerta no principal y luego camine hacia el segundo piso desde donde podía tener una panorámica del salón de la fiesta y cuando estuve bien situado ubique a Sonia. No habían pasado más de quince minutos de cuando yo me fui y al regresar encontré a Rafael como un buitre a la cacería de ella. Ellos hablaban y reían, a fin de cuentas yo ya sabía que a Sonia le resultaba agradable Rafael y el con su labia, tenía fama de conquistar con mucha facilidad a cualquier mujer. Sonia, mi esposa, siempre presumía de ser ...
«1234»