1. Lactancia muy morbosa


    Fecha: 21/09/2017, Categorías: Fetichismo Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... de nuevo a mamar aquel regalo del cielo en forma de pecho. Finalmente Sofía nos hizo salir de nuestro trance mamador, con unas convulsiones y gemidos que nos pillaron por sorpresa. – Nena, te has corrido? – preguntó Paqui entre carcajadas y muy sorprendida – Uf, es que aún no me he recuperado del parto, y no puedo tener relaciones todavía, por lo que estoy muy sensible. Así que si, me habéis hecho llegar – explicó entre sofocos. – No te creas, yo también me he excitado, es la primera vez que hago esto, estoy mojada y todo – confeso Paqui – y tú, cómo estás? – me preguntó, y posando una mano en mi rodilla para abrirme de piernas – Pues ya lo ves – dije agachando la mirada para comprobar como de abultado tenía el paquete, pues llevaba empalmado desde hacía rato – Uf madre mía – dijo Paqui, mirando como se marcaba mi pene tieso en el pantalón – eso tiene que dolerte. Sácatela que vamos a probar ahora otro tipo de leche Hipnotizado por su comentario, me puse de pie, pero fue la propia Paqui la que apresuradamente comenzó a desabrochar mi cinturón, luego pantalón, bajó la cremallera y bajó con un movimiento algo brusco mi pantalón y boxer a la vez, haciendo que mi polla saliese disparada y botase delante de sus caras. Paqui estaba todavía de rodillas delante de mi, y Sofía seguía sentada en el sofá. Mi polla entiesa quedaba a un par de palmos de sus caras, y ambas tenían su vista fijada en mi pene, examinando su forma y tamaño. Vaya, menuda polla gastas, no? Desde luego engañas, ...
    ... con lo pasmadito que pareces en la oficina y me sales con este trozo de carne – dijo Paqui con un descaro que hizo reír a Sofía. Paqui, alzó su mano y cogió mi pene, y lo sacudió unas cuantas veces, notando su dureza y apretándolo un poco. Dicho eso, acercó su boca a mi empalme y recorrió con su lengua toda su largura, para acto seguido, al llegar a la punta y lamerla un poco, introducirse todo mi pene en su boca. Noté la humedad de su boca empapando mi sexo y como quedaba prisionera entre su lengua y músculos bucales, fue una sensación muy agradable. Entonces comenzó una mamada muy placentera, introduciéndose más de la mitad en su boca. Tras unos instantes paró y se la sacó de la boca. – Tienes una buena polla, durita y gordita, como a mí me gusta. Si hay algo que me fascina de una buena polla es que llene la boca. Ten prueba esto – dijo dirigiendo mi polla hacia Sofía – No, no puedo, que estoy casada ya lo sabes – replicó – Que casada, ni que tonterias, dale una chupadita, que esto de aquí no sale, y una oportunidad así no se tiene cada día – dijo muy convencida Paqui, de tal forma que Sofía, simplemente se inclinó un poco hacia mí, y haciendo caso de su amiga, con una mano agarró mi polla y se la introdujo en la boca. Sofía chupaba con más dificultad. Debía tener la boca más pequeña porque no llegaba introducirse la mitad de mi polla en su boca. Succionaba con más ansiedad o nerviosismo, supongo que porque sabía que lo que hacía no estaba bien, chupársela a un compañero de ...