Entregando a mi novia 2 - Relatos Eróticos

Entregando a mi novia 2

Y asi fue, las fiestas se fueron sucediendo, con Adriana cada vez mas emputecida. Habia hecho buena amistad con Maua, que era un zorron, no tenia reparo en cogerse a su propio cuñado y le fue enseñando a mi novia secretos sobre el sexo, a mi novia le encantaba coger, pero en algunos aspectos aun era un poco inocente, y Maua se encargo de volverla un puton, rubio y delicioso, en un pais de mestizajes.

A los pocos dias de la ultima fiesta, aparecieron Jair con Maua un dia por la mañana. Nosotros aun en la cama, desnudos y despertandonos, los dos entraron a la habitacion y se "encargaron" de cada uno de nosostros.

Maua de mi, que sin mediar palabra se trago mi pija con una ereccion mañanera brutal, y Jair de mi novia, diciendole - practica conmigo la enseñanzas de Maua - y sin mas le metio la pija en la boca, que mi novia recibio como desayuno mañanero. Maua y yo nos quedamos mirando como Adriana engullia y saboreaba esa pija, yo con el morbo por las nubes y Maua atenta a corregirla, sin hecer mucha falta, Adriana se habia hecha adicta a esa pija y era todo pasion.

Asi empezo nuestro dia, cogiendo los cuatro en la misma cama, nos fuimos intercambiando hasta el mediodia, y paramos a comer.

Habian venido para invitarnos a una fiesta al caer la tarde en casa de Maua, que estaba cerca de casa, pero daba a la misma playa, por lo que la fiesta seria a orilla del mar.

Nos parecio genial, nos dijeron que iria poca gente, para nosotros y poco mas.

Adriana con el paso ...

... de las horas se fue poniendo ansiosa, ya no disimulaba nada sus ganas de ser cogida por mas de una pija, y me preguntaba con doble sentido y con una sonrisa de oreja a oreja, si seriamos bien atendidos.

Al llegar la hora, nos vestimos y salimos para la fiesta, caminado por la playa, que era el camino mas corto. Adriana se habia puesto un vestido de tirantes, muy liviano, de esos para ir a la playa, sin corpiño, descalza. Iba radiante, y muy caliente, cada dos pasos, parabamos para comernos la boca y meternos mano.

LLegando empezamos a escuchar la musica y a unas 20 personas bailando y bebiendo, la casa tenia un jardin que desembocaba en la playa y ahi era la fiesta. La edad de la gente rondaba los 30 años, un poco mas mayores que nosotros y como en toda fiesta habia mas hombre que mujeres, pero las que habia estaban muy bien.

Maua nos recibio y nos presento a los que andaban por ahi. La entrada de Adriana habia casi apoteosica, rubia con el pelo largisimo, donde predominaban las mulatas, fue seguida por sinfin de miradas.

Nos servimos unas copas y nos sumamos al baile, musica brasileña muy sensual, que mi novia aprovechaba para señirse a mi y colocar una de mis piernas entre la suya y restregarse, tampoco desentonaba entre los demas, el roce era comun entre los que bailaban, algunos sin camiseta, mostrando abdominales que mi novia se comia con los ojos.

Asi estuvimos bailando y charlando con la gente, hasta que al cabo de un par de horas aparecio Jair, lo vimos ...