Yo 16 y ella 12 - Relatos Eróticos

Yo 16 y ella 12

Actualmente tengo 19 años a punto de cumplir 20 , y vivo en la Ciudad de México, soy moreno claro, de 1. 78, soy alguien normal, como todos, pero con el don de la palabra, pues se me facilita hablar con las personas y hacer amistades, incluidas en internet. Todo comenzó en Facebook (hace 2 años pues tenía la edad de 16), un grupo de animé en el cual comenté algo algo, y sin esperarlo una chica me respondió de forma amable, y se entabló una conversación larga, lo que provocó que nos agregáramos y seguir platicando, al principio pensé que era una cuanta falsa, (Cosa que no me importaba claro, pues platicábamos de la forma mas amena y divertida). Con el paso de las horas y días, esa conversación pasó a ser por medio de audios, fue cuando me di cuenta que era una chica de verdad, así que sin más problemas solo contestaba por medio de audios, y así fue por semanas, hasta que me me mandó una foto, era una chica bonita, mucho a mi parecer, igual respondí con una foto mía (Cabe aclarar que no soy guapo, ni me considero una persona hermosa),. Ella respondido de forma amable, diciendo que era lindo por medio de un audio, cosa que me hizo feliz pues me decían algo bonito. Pasaban las semanas y seguíamos platicando por teléfono, videollamadas, audios, la mayor parte de día, era una bonita amistad, hasta que un día ambos nos dimos cuenta que sentíamos algo, así que comenzamos a salir, nos conocimos del todo, nombre, de donde eramos, pero lo que nos preocupó fue la edad pues en ese tiempo ...

... yo tenía 16 y ella 12 años, pero nuestro sentimiento era tal que no nos importó. Igual, ahora como novios las semanas pasaban, cada vez en más confianza, comenzamos a pasarnos fotos intimas, ella medía apenas 1. 50 (No menos de 1. 60, pues no recuerdo su estatura exacta), su piel morena clara, y sus pechos pequeños y algo rosados, su trasero redondo y firme, una belleza a pesar de tener 12 años, comenzamos a hacer sexcam por las madrugadas y llamadas subidas de tono, así por semanas, era una relación bonita que teníamos escondida, pero felices claro. Al cabo de unos pocos meses después, cuando sugerí la idea de vernos, pagaría un viaje para ver a aquella niña que era mi novia, ella claro dijo que si. Y así fue, pues no mucho tiempo después pagué el viaje a Guanajuato, nos bimos, y abrazamos, incluso nos besamos, un beso apasionado que nunca olvidaré, yo era más alto que ella, así que tratamos de no parecer obvios para no tener problemas, llegamos a su casa, mientras sus papás no estaban (Llegué por la mañana y sus padres trabajaban hasta tarde), y claro nos besamos por minutos, algo grandioso. Para después ir a su cuarto y quitarle la ropa poco a poco, verla en persona resultaba muy excitante, más que en fotos, toqué su suave piel, sus senos, y su hermoso trasero, mientras no dejaba de besarla, al igual que ella, me quité la ropa y ambos desnudos nos besamos, mientras ella martubaba mi pene con su mano, a lo que dije; — Si llegan tus papas, sabes que tendré problemas, sabes ...