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Historia de dominación
Fecha: 08/03/2020, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... pollón de mas de 20 cm. Quedé un rato extasiado contemplándoselo hasta que Tom acercó con sus manos mi cabeza hasta hacerme tragar aquella maravilla. Empecé a chupársela lo mejor que pude intentando impresionarle. Pasando mi lengua por la cabeza roja de su polla y bajándola por el tronco hasta los huevos. Cuando la tenía bien ensalivada me la intenté tragar entera y empecé como pude a hacerle una paja con mi boca. El me agarró la cabeza y empezó a movérmela hacia delante y atrás ¡me estaba follando la boca!. Normalmente era a mí a quien hacían una mamada como aquella, pero el hecho de tener en la boca la polla de aquel chico tan bello me tenía muy excitado Sin aviso se empezó a correr en mi boca, intenté sacarla pero me agarró fuerte la cabeza y no me dejó retirarla, obligándome a tragar su semen. Eso no me gustó demasiado, no por el hecho de tragar su semen, sino porque era el quien había tomado el control y me estaba manejando como quería. Pero cuando alcé la vista, aún con su polla en la boca y vi esos preciosos ojos mirándome agradecidos por la mamada que le estaba haciendo, me dije que no iba a dejar ni una gota de su leche, tenía que ser toda mía para dejarle satisfecho. Después de correrse en mi boca yo seguía chupándosela intentando sacar hasta la última gota. Tom me hizo levantarme y me dio un beso con el que probó el sabor de su propio semen, eso me excitó mucho. Mientras nos besábamos acariciaba mi espalda y con su mano llegaba hasta mi culo, metiendo un ...
... dedo entre mis nalgas. Yo estaba totalmente excitado y entregado a mi pasión por aquel chico que me volvía loco. Me apoyó de espaldas a la pared y empezó a bajar con su lengua por mi cuerpo, primero chupándome mis pezones, sin despegar la lengua de mi cuerpo iba recorriéndome el pecho de uno a otro a través de mi mata de pelos, poniéndome cada vez mas a mil. Cuando me había succionado bien ambos pezones empezó a deslizarse hasta mis huevos, pasando la lengua de uno a otro, continuando por el tronco de mi polla y finalmente llegar hasta la cabeza que tenía a punto de estallar. El chico más guapo que había visto nunca me estaba haciendo la mejor mamada de mi vida. Ya no me importaba lo que me fuese a cobrar, estaba dispuesto a darle todo lo que me pidiese. Empezó a hacerme una paja con su boca y tuve que sujetarme a la pared para no desmayarme allí mismo, estaba tan excitado que no me importó que volviese a juguetear con sus dedos en ano, introduciéndome primero uno y luego dos. Me estaba metiendo sus dedos por el culo mientras me la chupaba y lo único que podía hacer yo era gemir del placer que me estaba dando. Estaba a punto de correrme cuando paró y se levantó para darme un beso mientras seguía manoseándome la polla para mantenerme excitado - quiero follarte – me dijo al oído Yo ya había perdido la razón, estaba demasiado excitado como para decirle que no- siii, lo que quieras – le dije entre gemidos Me dio la vuelta apoyando mis manos contra la pared, ...