Juegos sexuales con Doña Mayra - Relatos Eróticos

Juegos sexuales con Doña Mayra

... turno -qué te gusta que te hagan cuando tienes sexo?-, entonces ella se quedó pensando y me dijo -me gusta que me hagan un buen sexo oral-. Mi verga estaba ya tiesa en mi traje de baño. Turno de doña Mayra, -bueno, en que eres bueno en el sexo, según tú?- , me quedé pensando pero la respuesta ya la tenía, -creo que soy bueno haciendo el sexo oral- le dije y ella se río. Ini Luego pregunté -tendrías sexo con un hombre mucho menor que tú?- ella dijo con la cabeza -si- ella inmediatamente preguntó -tú tendrias sexo con una mujer mucho mayor que tú'-, ahora fui yo quien asintió con la cabeza. Lo demás fue por añadidura. Nos besamos dentro del jacuzzi natural. Nuestros labios se frotaban y luego ella metió su lengua en mi boca y yo la recibí, la atrapé entre mis labios y después mi lengua se entrelazaba con la de ella. Al rato ella misma se despojo del top de su traje de baño. Sus senos eran bellos y de buen tamaño. Los besé por todos lados y luego con los labios chupé sus pezones, uno y otro. -qué rico me los besas- me dijo ella. Yo seguí mamándo sus tetas deliciosas. Sentí la mano de Mayra tocar y acariciar mi bulto en mi traje de baño, y luego ella metió su mano adentro y ahora me acaricio la verga con su mano, lo hacía delicadamente y luego lo tomó entre su mano y me masturbaba lento pero rico. Unos minutos más asi y luego ella me dijo -vamos a ver si eres bueno- se quitó la parte de abajo y pude ver su coñito casi totalmente depilado, algunos pelitos de color oscuro ...

... rodeaban su bella raja. Se sentó en la orilla y me invitó a comerle su chuchita. Estaba yo obligado a hacerle una buena mamada. Comencé besando y lamiendo su entrepierna, chupé y lami sus muslos internos y poco a poco me acercaba a su raja. Le pasé la lengua a sus labios vaginales y ella gimió. Segui concentrado en lo mio. Le pasé la lengua desde arriba del ojo del culo y lamí y chupé hasta llegar a su clitoris, donde la punta de lengua, le hizo pequeños circulos alrededor y encima de ese botoncito. Ella gimió más y me tomó de los cabellos, sin mucha fuerza. Luego me hundió el rostro en su sexo. Yo chupaba y lamía por doquier con mucha intensidad, ella seguia gimoteando. -ya papi,. ya papi, asi. asiiii!!-, y comencé a sentir sus jugos amargos que salían de su vagina. La doña se estaba corriendo. -Ahora es mi turno- me dijo y ahora quien se colocó en la orilla fui yo. Ella me quitó el traje de baño y mi verga por fin fue liberada, no es que tenga un pene exageradamente largo, pero me defendía bien. Ella hizo el comentario -ayy chico, este pene no es de niño ya!-, eso me hizo sentir seguro. Ella comenzó a lamerlo, luego a chuparlo y lo hacia muy bien, me sacó quejidos de placer. Incluso me lamió los cojones, me hizo vibrar de gusto. Me dejó la verga a lo máximo. Ella sabía a donde llegar. Luego me dijo que se sentara dentro del agua y ella se fue sentado encima, tomó mi pene lo puso casi vertical y lo fue colocando en su raja mientras ella se iba sentando, sentí lo caliente de su ...