Mi esposa se volvió su puta
Fecha: 04/04/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Slim Pantyhose, Fuente: CuentoRelatos
Hola:
El día de hoy estoy feliz y ansioso de platicarles una historia real y deliciosa; y es el hecho de cómo mi esposa se volvió la puta de un casado durante su paso en un restaurante VIPS.
Después de tanto insistir con mi esposa de que me platicara sus aventuras sexuales que ella había pasado antes de conocernos, noche tras noche, cada vez que hacemos el amor, finalmente ayer se decidió a comentarme una de sus historias.
Comenta que, cuando ella trabajaba en un restaurante VIPS del primer cuadro de la ciudad de México, un día conoció a un proveedor del lugar, quien entregaba sus mercancías al restaurante en cuestión todos los días sábados. Esto facilitó mucho la situación que se dio entre ellos. Resulta que éste tipo cada vez que tenía que hacer sus entregas correspondientes, el último lugar que visitaba era la sucursal en donde trabajaba ella y que siempre era lo mismo, que intentaba acercarse a ella de muchas formas, hasta que cansada de tanta insistencia, un día se quedó platicando con él hasta después de su hora de salida acostumbrada.
Le salió con la onda de que, ella era muy parecida a su esposa en muchos aspectos, pues él era casado. Pero que había un detalle en que se diferenciaban, que su esposa no le gustaba usar pantimedias por nada del mundo y que en este caso, a ella sí, entonces esa era la diferencia que marcaba la admiración que él sentía por la que ahora es mi esposa.
Total, que para no hacerles el cuento largo, terminó invitándola a ...
... salir.
Las tres primeras salidas eran a algún bar, a un cine o a cualquier otro lugar, pero él, siempre con la intención natural de cada caballero, poder llevársela a la cama.
En la cuarta salida resulta que, se supone, la llevaría al cine, pues no. me platica que siguieron el mismo camino que los llevaba al cine, pero de repente desvió el coche y se metieron a un hotel. Al principio ella se negó, pero bueno, fue tanta la insistencia por parte de él que ella finalmente accedió entrando al cuarto, bajo la condición de que no sucediera nada, excepto las caricias normales; porque me comenta que el tipo éste le fascinaban las piernas de ella por el hecho de vestirse con pantimedias.
Ya se imaginarán, él seguía insistiendo con ella hasta que terminó accediendo. Me comenta que a él lo que le encantaba de mi esposa es que, le daba unas sesiones de sexo oral riquísimo y es verdad, quiero pensar que, por tantos momentos así, ella adquirió la experiencia necesaria para hacer un sexo oral delicioso.
Esas salidas se hicieron permanentes. Cada sábado era salida directa al hotel. Me platica que le hacía muy buenos trabajos. Que cada vez que ella se ponía de perrito y él la cogía por detrás, que siempre le susurraba al oído que siempre iba a ser su puta, que porque su esposa no era la suficiente hembra como para tenerlo siempre en la casa y que cuando conoció a mi esposa, se dio cuenta que con esa cara que tenía, deseaba verla haciendo gestos a la hora de coger.
Una de las posiciones ...