Y así empezó todo... - Relatos Eróticos

Y así empezó todo...

... profundamente, mi verga se puso al palo, en ese momento me media 17cm, a el 16cm. Me quitó la remera y me fue besando todo el cuerpo lentamente, haciéndome chupones en cada rincón que encontraba, lamiendo y disfrutando cada CM de mi cuerpo, hasta que porfín llego al boxer, el cuál prácticamente lo arrancó de mi,, comenzó a lamer y besarme el pubis, luego se metía ambas bolas enteras en la boca, yo solo me excitaba mirando su carita angelical, esos ojos enormes mirándome mientras me lamía y sus labios carnosos con mi bolas dentro de su boca, era un sueño hecho realidad, algo que jamas pensé que sucedería; Pasado el rato se metió mi pene entero en su garganta sin pensarlo, me quedé asombrado viendo como entraba tanta verga en ese cuerpito, se la sacó de la boca y con las babas y precum entre sus labios me dijo que había practicado con bananas y pepinos, le saqué mi polla de entre sus labios, me acerqué a el y lo besé, saboreando su saliva que tenia entre sus labios y restos de precum. nos besamos apasionadamente, lo recosté y era mi turno de saborearlo, lo bese y lamí de pies a cabeza, saboree cada parte de su cuerpo, estuve un rato largo mamándole la verga, hasta que me dijo: Nahuel: -quiero ser tuyo, penetrame!- Yo: -ya sos mio bebe, y yo también soy tuyo, no te preocupes por eso- Se puso boca abajo y levantó las nalgas para que queden frente a mi, abrí esa colita tan deseada y esperada con ambas manos y comencé a besarle la colita y chuparle el agujerito peladito y ...

... doradito que tenía, mientras le metía la lengua, el me chupaba los dedos, los cuales luego se los metí profundamente, primero uno, después otro y otro mas, hasta que se dilató lo suficiente, le hice mamar mi verga tomándolo de la cabeza y los pelos, se la metía hasta la garganta, a tal punto que le follaba la boca, hacía alguna que otra arcada de tanta verga junta. Se la saqué de golpe y le dí una nalgada, le apoyé la cabeza y comencé a empujar, el hacia gemidos de placer y me decía que se la meta mas fuerte que quería que entre toda, al rato de empujar, su ano empezó a ceder paso, sentía como se abría lentamente hasta que entró mi dura y cabezona punta de mi verga, el hizo un gemido de placer, su cara se arrugó abriendo la boca y sus ojos se cerraron, me decía entre gemido y agitación de su voz que eso era lo que el quería, darme placer y nada mas, solo eso; Hicimos una pausa, el en cuatro y yo con la cabeza de mi pene dentro de su cuerpo, en uno de esos gemidos, en ese momento no tan agitados dijo -métela toda, quiero sentir tus huevos chocando los míos- y yo le dije -si te la empujo de golpe te dolerá-, Nahuel hizo un brusco empujón, mis caderas estaban pegadas a su cuerpo, nuestras bolas chocándose mutuamente, el gimiendo y agitado aun mas que antes y mi verga entera dentro de su estrecho y calentito ano, nos quedamos quietos unos 5 minutos aproximadamente y seguí con mis embestidas suaves, la sensación de tener a ese chico, a ese amigo, a ese amante, a esa pareja, a ese amor, ...