-
Mi madre divirtiéndose en los baños del autobús
Fecha: 13/04/2020, Categorías: Gays Autor: Gerardjking, Fuente: CuentoRelatos
... que otro hombre usaba su ano para su diversión. Los hombres que embestían de forma violenta los agujeros de mi madre eran robustos de piel morena con vergas de buen tamaño y los huevos bien peludos. Los tres están disfrutando de lo lindo que no se percataron de mi presencia. —¡Sigan así que ya casi llego! —exclamó entre gemidos la zorra de mi madre. —Nosotros no, tenemos energías de sobras. —Te daremos verga para toda la noche. Reconocí la voz de ellos, eran los hombres que entraron al baño después que yo. Al final si se le cumplió el deseo de chingarse a mi madre. —¿Qué? ¿Todavía tienen más? —Habló con mucha felicidad—. ¿Qué tal si mi hijo despierta y no me encuentra? —Que se vuelva a dormir el cabrón, que su mami está muy ocupada atendiendo nuestras vergas. —Tienen razón, mami está muy ocupada con sus nuevos amigos, ¡Oh sí! ¡Llénenme toda, por favor! —¡Amo esta puta! —¡Yo amo el culo de esta puta! —¡Y yo amo ser la puta de ustedes! ¡Lo amo tanto! ¿Cómo puede ser tan puta ...
... mi madre? No lo entiendo de verdad. Tampoco me entiendo a mí mismo que me excita ver como se cogen a mi progenitora y como ella se humilla de esa manera. Me mantuve quieto viendo como esos dos pedazos de carne salían y entraban del coño y del culo de mi madre a un ritmo demencial. Ella solo soltaba gemidos, gruñidos y pequeños balbuceos por el placer. No me quede más tiempo porque el que le estaba penetrando el coño y chupando las tetas dijo que era turno de probar ese prieto culo. Tenían que moverse y me iban a ver, así que con mucho cuidado cerré la puerta del baño y regrese a mi asiento donde me masturbe. Paso como una hora hasta que escuche unos pasos dirigiéndose a mí. Me hice el dormido recargándome en la ventana. Escuche las risas de esos cabrones a la vez que me insultaban en voz baja. Después sentí como mi madre se sentaba a mi lado. Ella se acercó a mi frente para brindarme un beso con sus labios babosos. —Buenas noches, hijito. —Se oía feliz y cansada con el aliento apestando a semen.