Yo 27, seduciendo a uno de 50 - Relatos Eróticos

Yo 27, seduciendo a uno de 50

Yo soy Saúl y tengo 27 años, vivo en México, en el estado de Quintana Roo cerca del mar caribe, me describo soy moreno, mido 169 cm y peso 70 kilos, mi cuerpo es normal ni gordo ni flaco, me mantengo gracias que salgo a correr un poco en las tardes, ni guapo ni feo. Soy mayormente activo, pero este relato es de esas veces que fui pasivo. Ahora si empezamos mi relato. Por cuestiones del trabajo tenía que asistir a un reunión, bueno solo tenía que llevar unos papeles y regresar a la oficina, pero llegando al lugar me dijo mi jefe pues ya estás aquí quédate. Me quede en el área de la recepción, viendo a la gente entrar, en una de esas que pasa una persona que me llamo la atención, era un señor yo le calcule 50 años, su pelo griseado, claro de color nariz algo larga, ojos misteriosos, alto y delgado, algo de buen ver, no sé qué me paso en ese momento pero esa persona me atrajo, la reunión se llevó acabo y yo a lo lejos le dedicaba una mirada a ese señor, tenía ganas de llevarlo a un lugar apartado agarrarlo a besos, quitarle la ropa, desabotonar su camisa y bajar su pantalón, me sorprendió esas ganas que tenía. Luego el me regresaba las miradas y todo, ese día no pasó nada no sabía ni quien era y nada de él, lo que si sabía es que me tenía como una llama incandescente, sentía una gran atracción y deseo, solo al terminar la reunión se despidió de mí. Hice una búsqueda por Facebook y lo encontré, le hice un comentario sobre la reunión y me respondió, de ahí le envié un inbox y ahí ...

... quedo la plática un poco fría pues no nos conocíamos, luego por Facebook de vez en cuando lo saludaba y así la cosa. Ya en un evento me lo encuentro y se acerca a mí y me da su número telefónico, yo tuve que actuar normal pero por dentro estaba que brincaba de felicidad, porque sabía que él había dado el primer paso, ahora me tocaba a mi dar mi paso, pasando unos días de ese hecho, le envió un mensaje preguntando que andaba haciendo, me dijo en una reunión pero estoy por salir como se antojan unos tragos, yo le dije si con este calor más, me invito a tomar. Paso por mí y fuimos a su casa, nos sentamos y estuvimos charlando por más de una hora, yo no veía la hora de ir sobre él, resulta que salgo a orinar a fuera y cuando regreso me le quedo viendo, el me ve y siento esa electricidad recorrer mi cuerpo, me acerco a él, tomo su manos y lo abrazo, lo empiezo a besar, puedo sentir esa sabor a entre labios entre alcohol y deseo, le quito la camisa, acaricio su pecho voy besando todo su cuerpo hasta bajar a su pantalón el cual le bajo, quedando justamente enfrente de su entrepierna, admiro lo que se esconde bajo su bóxer, paso mi boca sobre el bóxer, oliendo ese olor a hombre que desprende, lo saboreo, lo toco y paso mi lengua, lo miro a los ojos desde la posición en la que estaba y solo veo esa cara de hombre en llamas, excitado y disfrutando. Llegando el momento de descubrir lo que tenía bajo el bóxer, al bajarlo quede sorprendido era una cosa de 19 cm y grueso, lo mire y me dijo ...